"𝘕𝘰 𝘩𝘶𝘣𝘰 𝘱𝘦𝘤𝘢𝘥𝘰 𝘮á𝘴 𝘨𝘳𝘢𝘯𝘥𝘦, 𝘊𝘭𝘦𝘰𝘱𝘢𝘵𝘳𝘢, 𝘲𝘶𝘦 𝘱𝘳𝘰𝘣𝘢𝘳 𝘢𝘲𝘶𝘦𝘭𝘭𝘰𝘴 𝘭𝘢𝘣𝘪𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘤𝘢𝘳𝘮𝘦𝘴í 𝘭𝘶𝘫𝘶𝘳𝘪𝘰𝘴𝘰. 𝘛𝘶𝘴 𝘰𝘫𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘮𝘢𝘭𝘢𝘲𝘶𝘪𝘵𝘢 𝘮𝘦 𝘦𝘮𝘣𝘳𝘶𝘫𝘢𝘳𝘰𝘯 𝘥𝘦𝘴𝘥𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘴𝘵𝘦 𝘢 𝘙𝘰𝘮𝘢 𝘴𝘶𝘳𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘭 𝘔𝘦𝘥𝘪𝘵𝘦𝘳𝘳á𝘯𝘦𝘰. 𝘏𝘰𝘺 𝘯𝘰𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘱𝘦𝘥𝘪𝘮𝘰𝘴 𝘮𝘪 𝘳𝘦𝘪𝘯𝘢, 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘩𝘢𝘣𝘳á 𝘮á𝘴 𝘈𝘭𝘦𝘫𝘢𝘯𝘥𝘳í𝘢 𝘺 𝘮á𝘴 𝘊𝘢𝘳𝘵𝘢𝘨𝘰 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘯𝘰𝘴𝘰𝘵𝘳𝘰𝘴 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝘤𝘪𝘦𝘭𝘰 𝘥𝘦 𝘖𝘴𝘪𝘳𝘪𝘴" Estas fueron las últimas palabras que recibió la última faraona de Egipto antes de sucumbirse ante los letales talentos de una cobra. Tal y como Eva mordió la manzana, la serpiente mordió a Cleopatra, encarnando una vez más el mismo poder del diablo y arrebatando así al pueblo de Egipto su única salvación. Marcopatra es la historia de los lujos y las indecencias, del azabache y del lapislázuli, de la sangre y del amor. Una tragedia desgarradora que nos enseña las verdades que se ocultan en lo más profundo de nuestra agonía interna, donde la arena del desierto y las ramas de los laureles parecen integrarse en un único arkhé universal.