La vida le ha demostrado a Kristel Kellogg que ningún problema se resuelve solo y que algunas heridas nunca se cierran. Tras años del fatídico accidente que le arrebató la vida a su hermano menor, Kristel carga encima una herida abierta y una culpa insoportable. Cedric Reed tiene la vida perfecta, o al menos es así cómo él lo quiere ver, pues al enfrentarse a la caótica familia que tiene y a un corazón roto, se niega a aceptar que no todo a su alrededor es tan bueno como cree. Entre dolores del pasado, heridas abiertas y difíciles momentos, Kristel y Cedric descubrirán que hay un mal que los une. ACTUALIZACIONES LENTAS.