Astrid se siente extraña cada vez que ve a Hipo con esa chica nueva y cree saber porqué. Hipo sólo desea concentrarse en ser un buen líder y no quiere desenterrar sentimientos del pasado. Ninguno quiere dar el primer paso y cuando finalmente tienen la oportunidad de bailar la misma pieza, la canción termina, los caminos se separan y las palabras que deben ser dichas jamás fueron dichas. Incluso después de cruzar el archipiélago, todo lo que queda es una hoja mojada con cuatro palabras en ella.