Recuerdo que escribir era un mártir para mi, ¿por qué? Bueno, me dolía la mano de hacerlo tan rápido, las ideas fluían más veloces que mi cuerpo y eso me daba cada calambre que detestaba el momento en que la maestra anunciaba un final alternativo del libro que habíamos leído en clase.

Así comienza mi historia de escritura. Con una niña perezosa, adolorida y con muchas, MUCHAS faltas de ortografía. Gracias a la lectura y al tiempo, fui mejorando y aprendiendo. A los dieciséis comencé a escribir más por mi cuenta que por pedido de profesores y desde ese día no paré hasta hoy. Sin embargo, fallé. Me centré demasiado en historias compartidas, roles y foros que no logré concretar demasiados proyectos propios. Sirve de practica, distracción, entretenimiento y un buen método de conseguir amistades, pero eso hace que las historias y libros estén más lejos de mi alcance.

Me llamo Natalia, tengo veinte y tantos, y aun no muestro mis novelas al mundo, pero me gustaría algún día ser lo suficientemente buena para que todos puedan apreciarlo. Espero que si leen algo mío, sientan la vida que quiero darles a mis personajes y, por sobre todo, disfruten y se entretengan con ellos.