Sentía un vacío en el estómago, claro si tuviera estómago. La verdad era que tenía mucho miedo. Esa tarde Color le había dicho que no lo visitara. ¿Por qué?! ¿Por qué debía de seguir sus órdenes?, ¿por qué le causaba tanto miedo esa idea? ¿Por qué su mente lo traicionaba de esa manera? Color es lo único que le queda, lo único en todos los malditos universos que vale realmente la pena, es... La única alma que le brindó un poco de aprecio, un poco de amor verdadero, más haya de solo tenerle miedo, pena, asco o que lo manipulara, era alguien en el que realmente podía confiar. Pero... Esa vez, la última vez que se vieron Color no habló como antes lo hacía, realmente se veía débil, como si hubiera hecho una ruta genocida, o algo por el estilo, ni siquiera Killer podía interpretar los resoplos de Color, como si le costara respirar.
Tenía miedo.
Y como el buen perro que es, obedece las órdenes a cualquier persona que lo considere "mayor" a él.
Sus huesos temblaban, ya no lo soportaba tenía que ver a Color o si no se volvería más loco... Pero ¿Y si no? Si va, y color está bien, es del cráneo roto se enojaría con él... Pero si va y si su instinto no se equivoca...
Agh... ¿Que hacer?....