"No te rindas. Sigue adelante, incluso cuando parezca imposible" - Taylor Switf
A veces me detengo a pensar en todo lo que he pasado… y no puedo evitar sentirme profundamente orgullosa. Nací de apenas cinco meses, desafiando todas las probabilidades desde el primer instante. A lo largo del camino, la vida me puso a prueba una y otra vez: un ACV, el dolor silencioso del bullying, momentos en los que sentí que no encajaba, en los que pensé que no podía más.
Y, sin embargo, acá estoy. Con cicatrices que cuentan historias, con una sonrisa que no se rinde, y con una fortaleza que fui construyendo paso a paso, día tras día. ❤️
El 28 de julio de 2024 marcó un antes y un después en mi vida. No porque algo terminó, sino porque algo verdaderamente hermoso comenzó. Ese día conocí a personas maravillosas, personas que hoy son mucho más que eso: son mi familia elegida. Me hicieron sentir acompañada, contenida, vista, valorada por lo que soy, sin máscaras ni filtros.
Aprendí que la vida, aunque duela, aunque golpee, siempre vale la pena. Que incluso en la oscuridad más profunda, hay una luz esperando. Y que nunca, jamás, hay que dejar de luchar, aunque todo parezca cuesta arriba. Porque cada paso –incluso los más difíciles– me trajo hasta este momento.
Hoy sigo de pie, con más fuerza que nunca, agradeciendo lo vivido y abrazando lo que viene. Porque si hay algo que tengo claro es que no pienso rendirme. No ahora. No nunca.