Este mensajito va dedicado a mis fieles lectores, a los que les agradezco el tiempo que se toman para leer mi historia, sepan que detrás de esas palabras, hay estrés, noches en vela, apuntes sin sentido, horas escondida en un lugar donde nadie me encuentre, música a montón para lograr ese estado mental en el que todos los sentimientos están a flor de piel, imaginarme como Sage y sentir lo que ella siente, imaginarme como Desmond y preguntarme que haría el en cada situación. El escritor necesita tener una mente fuerte para no rozar la locura, no llegar a confundir lo irreal y lo real. A todos gracias por tener en cuenta mi trabajo. Significa mucho para mí saber que alguien me escucha... Los quiero en serio.