Sentada sola en mi habitación este 24 de diciembre, me doy cuenta de que nadie se daría cuenta si me aviento del techo de mi casa. Nadie se daría cuenta si me tomo un bote de pastillas entero, si paso un cuchillo por mi gargantilla. Podría matarme en este preciso momento y nadie de mi familia notaria mi ausencia. Ninguno de mis amigos lo notaria, no instantáneamente claro. Nadie quedaría permanentemente dañado, ni siquiera mi propia madre y ni que decir de mi padre ausente. Supongo que estarían triste los días del funeral y esas cosas, como por cualquier persona, pero nadie quedaría permanentemente triste si me voy. Nadie me necesita como el aire que respira, todos seguirían adelante con sus vidas; y no es que no quiera que lo hagan. Lo que digo es que nadie quedaría con un vació permanente, que aunque pase el tiempo y lo superes sabes que esta ahí. La única persona que se que quedaría completamente devastado eres tu, pero ya no estas. Ya no eres parte de mi vida, te fuiste tal vez porque estaba consumiendo tu vida, no lo se. Lo único que tengo seguro es que te fuiste. El tiempo ha pasado y yo sigo aquí como tonta esperando a que regreses, aunque se que no lo harás. Me haces tanta falta, como no tienes idea. Cada día es peor que el otro, cada día te extraño mas. El simple hecho de respirar es dificil, porque no estas conmigo. Crei que estaba bien, creí que ya te había olvidado, que tonta fui al creer eso. Nunca te olvidare, nunca podre superarte. Los humanos somos muy tontos al creer que tenemos lo que queremos asegurado. Contigo comprobé muy bien que no es así, quizá nunca te lo dije, o nunca me di cuenta, pero eres lo único que necesito para ser feliz. Puede que suene exagerado, pero es la verdad, si te tengo a ti no necesito de nada. Llenas el vació de mi corazón a la perfección. Se que tu eres la única persona que quedaría sin remedio si yo me voy. Lo se con tanta certeza porque si tu te fueras, mi mundo se derrumbaría por completo, no podría soportarlo.