Sus maletas hallábanse en la entrada de la residencia, mientras la rubia sólo esperaba sentada en el sofá con dos regalos envueltos pulcramente en su regazo. De vez en cuando miraba por la ventana y luego hacia las escaleras, esperando a dos personas en especial, su padre que pasaría a retirarla, aunque en ese entonces más bien deseaba que se retrasase un poco y por otro lado... No tarda en ponerse de pie cuando ve bajar al pelirrojo, no evitando sonreír suavemente con un ligero rubor en sus mejillas, que se reflejaba en sus rubias hebras que surcaban sus mejillas. ──Blake. Perdón por llamarte tan de golpe. ──inicia la conversación, sintiéndose un poco inquieta de golpe, esfumándose la tranquilidad de instantes antes, para dar paso a una sutil e implícita ansiedad. ──A-ah, sí, lo primero, estos son mis regalos de navidad, uno es para Jade.. espero que no le parezca muy.. confianzudo de mi parte, sólo no pude evitar querer darle un detalle ya que ella me compartió algunas recetas. ──explica acomodando un mechón de cabello tras su oreja, extendiendo ambos obsequios hacia él. Nuevamente mira al exterior, no hallando el coche de su padre fuera, respira hondo, al final no tenía una excusa para huir. ──Son.. Un poco delicados, así que deberás ser cuidadoso con ellos, ¿sí? ──aconseja mirándole a los ojos, un poco rojizos por debajo, tal vez por el frío.. tal vez por algo más. ──Por cierto, Blake.. yo quería decirte algo, antes de irme, prometo ser breve, si tienes tiempo.. ¿podrías dármelo?