Capítulo 9.

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-¿Qué? ¿Por qué lo haces?

-Te gusta hacer muchas preguntas, estoy en contra de lo que hace mi hermana.

-Pero no es necesario, ya estoy acostumbrada.

-¿En serio? Que masoquista.- dijo Jan algo confundido.- Ven, te llevo a tu salón - él estaba extendiendo su mano, acaso ¿Me iba a llevar de la mano?

-No es necesario.

-Por favor, Angélica. Dejame ayudarte.

-¿Sabes que así tu hermana me va a odiar más y me va a acosar más

-Ella necesita ayuda.

-¿Esta loca?

-Sí, dame la mano.

Y sí, le di la mano, aunque muy asustada, asustada de todo lo que puede pasar después de esto. En esta escuela los chismes corren como en un maratón.

Todo estaba en silencio. Me sentía como en esas películas en la que en la noche anterior haces algo malo y toda la escuela se entera, llegas al día siguiente y al ir caminando por el pasillo principal, todos te ven muy pero muy raro.

-Tranquila.- dijo Jan susurrando- ellos no importan.

Me sentía tan, pero tan protegida que no quería que me soltara nunca, esa extraña sensación recorría todo mi cuerpo y eso es... Es hermoso.

Y llegamos al salón, todo permanecía en silencio.

-Te dejo, tengo que ir a clases, pero recuerda, no estas sola.- me dijo con esa hermosa sonrisa- Si te hacen algo, no dudes en llamarme, yo estaré para ayudarte.

-Gracias, en serio, gracias, no se como agradecerte - quería llorar.

-No, no, no, no llores, te ves más bonita cuando sonríes.

¡Santo Dios!

-Gracias Jan.

-De nada y perdón que te deje sola.

-Descuida, te veo luego.

-Adiós.

-Adiós.

Como siempre, las clases se me hicieron eternas, pero gracias a Dios, ya era hora del descanso.

Busqué a Meghan, pero no la encontré estaba sola y eso me daba miedo. Y por desgracia mía tenía mucha hambre y no me quedó de otra más que salir sola e ir a la cafetería por algo.

-Ni creas que te ibas a salvar de mí - me dijo Emma con su voz amenazadora.

-Yo, yo...

-Sólo te voy a decir una pequeña cosa, no tengo ganas de perder el tiempo.

-Dime..

-No te ilusiones con mi querido hermanito ¿En serio crees que alguien tan guapo como el se va a fijar en una estúpida, en una cerda como tú?

Auch, eso dolió.

-Yo...- ya casi estaba al borde del llanto, sus palabras hieren tanto.

-Mi hermano suele tener buenos gustos, no pésimos como tú, así que lo más probable es que sólo te tenga lástima.

Ella comenzó a reírse, lo había logrado, había logrado hacerme sentir mal.

-Te estaba buscando - dijo esa voz masculina, que ahora me encantaba, me aliviaba oír.

Traté de ignorarlo pero me siguió.

-¿Qué pasó? ¿Por qué me ignoras?

-Nada, no te estoy ignorando- intenté ocultar mi rostro.

-Mirame- al alzar mi mirada hacia él, sus ojos se abrieron como platos - Dios, Angélica ¿Has estado llorando? ¿Fue mi hermana? - yo sólo asentí.

Y me abrazó, sí me abrazó. Me rodeó con sus fuertes brazos y de nuevo me sentía protegida, su delicioso aroma me impregnaba, no quería que esto acabe. Que hermosa sensación.

You are my hero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora