✧ Capitulo IV

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Falling for you de The 1975 está sonando en la cafetería mientras Harry intenta no tener una crisis de estrés debido a la cantidad de gente que está llegando, algunos molestos por el servicio lento, otros devolviendo las malteadas porque no están saliendo cómo lo deseaban o simplemente porque se equivocó al hacer combinaciones.

Lo peor de todo es que apenas es su primer día de las dos semanas, es lunes y a servido más frapuchinos que los últimos cuatro días. Nunca le habían tocado tantas personas desesperadas, es cómo si de pronto las malas energías le estuvieran jugando un mal momento, realmente quiere salir corriendo de ahí, ni siquiera a tenido oportunidad de ir al maldito baño porque tiene necesidades.

Se siente triste al observar todas esas galletas quemadas en el cesto de basura, la leche sobre el suelo que no a podido limpiar, la crema batida sobre su delantal e incluso en algunos de sus rizos hay jarabe de vainilla. Está hecho un completo desastre que tiene ganas de llorar, no a servido de nada intentar relajarse o pensar en sus cosas favoritas.

Se va vengar de Xander por haberle dejado un trabajo demasiado pesado que su nivel de ansiedad no puede cumplir.

"Te pedí un panini de pepperoni, este tiene puro queso", uno de los clientes le dice desde el otro lado de la barra. Harry intenta lavar las licuadoras para preparar los siguientes pedidos que tiene en fila, "¿puedes cambiarlo por favor."

"Lo haré enseguida y una disculpa por el error."

"Todos tenemos días malos, no hay ningún problema."

Y al menos ese es un respiro, Liam tenía razón cuando comentó que nos hace falta empatía con los demás. Por fortuna el local se va vaciando poco a poco hasta que no queda ningún alma, el reloj marca las siete de la tarde finalmente. Fue un turno extenso y debería al menos quitarse las manchas de café sobre su rostro pero está demasiado agotado que termina por dejar caer su cuerpo en una de las mesas.

No siente las piernas que volver a casa caminando va ser un completo infierno, con solo pensarlo hace que las ganas de llorar aparezcan nuevamente. Se da cuenta que hay mesas sucias que es mejor limpiar, se levanta por el trapeados para intentar quitar los restos de leche en el suelo y se pregunta por qué la gente no tira su basura.

Es decir, eso le ahorraría un enorme trabajo, por algo tienen cestos en cada mesa.

"Buenas noches."

Y oh no, jodidamente no puede ser él, justamente ahorita que se encuentra cómo la mierda, realmente no, ¿acaso es el día de hacerle la vida imposible a Harry? y, ¿desde cuando se hizo tan dramático?, ni siquiera debería de importarle su apariencia, no es cómo si intentara impresionarlo.

"¿Interrumpí algo?", claro que lo pregunta porque el rizado no parece querer mover un musculo, "¿estás con vida?"

"Lo siento, he tenido un día pesado pero dime qué vas a ordenar para hacerlo de una vez y volver a sentarme o al menos limpiar mi cabello" Harry responde apenas con un hilo de voz que logra salir de su boca.

"No te preocupes por eso, en realidad venía solamente por un sándwich con un jugo de mango porque no tuve tiempo de comer" Louis sigue de pie, Harry no entiende el por qué así que levanta el rostro para mirarlo y.

Oh, por dios.

Sus ojos azules lo están mirando fijamente que puede sentir que se ahoga en ese océano profundo o cómo si estuviera entrando a una galaxia diferente. Lleva puesto un traje azul, su pelo está alborotado, tiene un rubor marcado en sus pómulos, sus pestañas revolotean cuando parpadea esperando una respuesta.

Pero honestamente Harry se a quedado sin palabras cuando su mirada viaja hasta los labios delgados del mayor, el color rosa sobre ellos, la barba de dos días que comienza a salirle. Harry traga saliva.

una tarde sin café ✧ Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora