La última vez que la vi físicamente, fue en Enero.
Ahora no fue en un sueño, como pasó de Marzo a Octubre.
Y en la distancia, mientras se alejaba, hice un juramento: aunque ahora esté con alguien más, nuestros caminos se volverán a cruzar.
Cuando la vida me haya tragado y escupido,
sabré que estoy listo para lo que sea.
Cuando haya muerto y vuelva a nacer, nada me detendrá.
La vi por última vez hoy, físicamente.
Suena a castigo olvidarla, pasar página y de repente vuelve a resurgir, de una forma u otra.
Eran las seis de la tarde, cielo nublado y el ambiente muy húmedo en el momento en que con sus amigas pasó. Bajo mis ropajes mugrientos de grasa hidráulica y aceite quemado no me reconoció.
No hay mucho por describir, a excepción de su caminar y mi mirada que la perseguía hasta que su imagen se difuminaba en la lejanía.
¿La volveré a ver una vez más? No lo sé.
Éste ha sido mi regalo de Navidad, dice mi corazón, convencido al terminar de escribir.
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a man's despair
RomanceI'm not the man you think I am. No soy el hombre quien tú piensas que soy.
