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La luna azul estaba en su mayor esplendor, los alfas, los omegas e incluso algunos betas, habían encontrado a sus parejas destinadas.

Cada uno formando un vínculo, uniendo nuevos miembros a su manada, ¡Claro! esto al día siguiente afectaría a muchas familias que ya tenían un jefe alfa, habría un duelo si llegaban a ver dos alfas en dicha manada.

Esos días eran los que más disfrutaba Escorpio, pues le encantaba ver como alfas de miles manadas venían a simplemente retarlo, solo por querer intentar ganarle.

Así que se hacían estos duelos para ver quién sería asignado como alfa de la manada.

Pero por el momento todos disfrutaban de la noche. Bueno casi todos excepto un alfa y un híbrido beta.

Después de su primer encuentro, tanto Tauro como Escorpio se odiaban. El signo de tierra como su orgullo era grande decidió trabajar las tierras para poder pagar la extraña hospitalidad del Alfa.

Su hermano pequeño, Capricornio, al parecer se había llevado muy bien con el omega real de la familia y viceversa, así que siempre estaban juntos, tanto que fue asignado como su guardia personal. Orden de un frustrado escorpio, porque odiaba tener que compartir a su mejor amigo.

Pero el Caprichoso niño alfa era demasiado terco, parecido a su testarudo hermano mayor. Así que lo dejo porque apesar de los chismes en el pueblo, el no era cruel, ni frívolo. Somo algo temperamental.

Con el paso del tiempo Escorpio y Tauro empezaron a llevarse un poco mejor.

El signo de agua ya no quería arrancarle la yugular cada vez que se enojaba con Tauro y el signo de tierra ya no se empecinaba o ya no le hacía la ley del hielo cada vez que su orgullo quería.

Pero la noche de luna azul llegó y todo se fue a la borda porque antes de que la luna comenzar a salir.

Los extraños y posesivos comportamientos del rey alfa comenzaron a preocupar a todo el personal del castillo.

¡No lo toquen! Es mío— gruñia con severidad, mientras en sus brazos sostenía el cuerpo frágil y enfermo de su mate.

Sí, ahora Escorpio había descubierto porque se sentía tan atraído a ese beta, porque lo quiso tener cuando lo vio, porque siempre sabía controlarse en su presencia e incluso aceptó a otro alfa en su hogar.

Por fin pudo reconocer que sí tenía un alma gemela pero al parecer el destino era cruel porque si no hubiera sido por la luna azul, jamás lo hubiera encontrado.

Para empezar. Tauro es un híbrido, esto lo descubrió hace unos días, era un no querido, un bastardo. Según los ancianos de la corte. Además también era un beta, jamás podría entrelazarlo, o embarazarlo.

Jamás sería suyo por completo.

—P-pero m-mi señor, si no lo atendemos va a m-morir— Respondió con apuro un pequeño omega, que con respeto dejo su cuello visible dando a entender que nadie lo desafiaba y estaba sumiso frente a él.

Estaba asustado, no quería que su destino fuera igual al de sus padres.

En cuanto la luna se asomó, Tauro calló enfermo, sus mejillas son rosadas lo hacía  parecer como si estuvieran en celo.
Pero no había aroma, solo ardiente temperatura y una lenta respiración.

Lo ponía tan nervioso ¿y si le pasaba algo?

No, no podía pasarle nada. Apenas estaba descubriendo su destino como para que suceda algo así.

¿Por qué Tauro reacciono así? Capricornio había mencionado que nunca le habia pasado esto. Es la primera vez.

¿A caso era su culpa? ¿Las almas gemelas pueden dañarse con un simple toque?

Yo lo llevo— Decía aún sin querer separarse de su mate, sin dejar de usar su voz alfa.

No, el jamás le haría daño, no ahora que lo había encontrado.

— Mi señor no es eso, necesitamos inspeccionarlo para ver que es lo que tiene— el omega ya estaba muy nervioso, si algo le pasaba a ese híbrido, el pueblo entero sería fusilado.

¡Ya dije que yo lo muevo! — Su voz sonó tan fuerte como el rugido de un dragón.

— Escorpio, por favor, si no lo atienden deprisa, él morirá, no se que paso pero tienen que salvarlo, lo quieres ¿no es así? — Piscis llego preocupado, tratando de calmar el ambiente con sus feromonas omega, su amigo bajo la guardia y dejo que el omega lo inspeccionará.

Solo piscis podía razonar con él, vivieron juntos desde la niñez, era su única familia.

— ¿Qué tiene? — Pregunto Piscis más tranquilo.

Lamentablemente ningún alfa podía entrar, ni siquiera su hermanito Capricornio, no con Escorpio y su alfa desenfrenado. Listos para matar.

— Parece ser que entro en celo, pero es un híbrido y un beta, así que no puede entrar en celo, por eso cayó en fiebre. Necesita un baño frío o si no morirá, su fiebre es muy alta, no conozco muchos híbridos pero la mayoría no sobrevive al celo de la luna azul— El omega mantenía su cabeza baja mientras informaba a los dos monarcas.

— Por favor atiendalo y no dejen que muera...— Volvió a ordenar Piscis ya que Escorpio estaba en shock, aún aferrado al beta.

— ¡No se atrevan! — Al ver como se le acercaban para quitárselo de sus brazos, utilizó de nuevo su voz, pero esta vez más débil, como de súplica, al ver esto, intento reiterar. — Si Tauro muere, el reino caerá en llamas. Y los primeros en morir serán ustedes.

Y con esto dejo que los doctores se lo llevaran, el alfa seguía en celo, el alfa necesitaba a su pareja, pero tenía que controlar a ese alfa o si no su pareja moriría.

Día de la luna azul, fue el día más doloroso para dos almas que pedían a gritos unirse en el ardor de la pasión.

Pero al parecer, el fuego los quemo y la luna por primera vez dejó de ser bella ante los ojos de un rey alfa.

......

¡Lo siento me tarde!

Uwu

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⏰ Última actualización: May 05, 2022 ⏰

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🌘 Dos lunas 🌒 (Zodíaco Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora