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Salí de la tina secándome el cuerpo con el mínimo cuidado para luego llevar la toalla a mi cabello y estrujarlo suavemente. Salí a mi habitación viendo la ropa que Oka-San quería que me pusiera, un buzo de mangas abiertas con largas cintas de color negro y una pequeña imagen estampada de fresas en la parte frontal, unos jeans negros normales y unas zapatillas simples. Después de vestirme bajé buscando a Oka-San y Oto-San pero no los veía así que me sentencia en el sillón principal.
A los segundos Oto-San se sentó a mi lado y sentí a Oka-San peinarme el cabello con suma delicadeza. Oto-San llevaba una camisa con las mangas remangadas hasta un poco menos del codo y unos jean con zapatillas, Oka-San llevaba unos jean blancos ajustados a sus perfectas piernas y una remera negra hasta el cuello a hombro suelto.
—Vamos cariño... —Me dio un pequeño beso en la cabeza y tomó la mano de Oto-San volteando y extendiéndome la suya.
—Hai.. —Me levanté tomándola y los tres salimos de la casa a algún lugar para cenar, al llegar entramos por una puerta alta y nos sentamos junto a una ventana del local.
A los minutos ya nos encontrábamos comiendo, yo y Oka-San decidimos ir por pasta mientras oto-San se fue por la carne aunque por obligación de Oka-San también tuvo que comer verduras al igual que yo, Oka-San enojado no es para nada lindo.
Me volteé viendo a la ventana, uno grupo de amigos pasaba felizmente volviendo o saliendo a algún punto.
Uno de ellos volteó en mi dirección y ante mi probable mirada de poco ánimo me sonrió calmadamente mientras decía algo.
S.. O.. N.. R.. I.. E..
Sonríe.
Me tomó por sorpresa pero de igual manera acudí a sus palabras sonriendo inconscientemente. Este a los segundos de verme se detuvo quedando frente mío solo que a una lejanía bastante notoria hehe.. Sus mejillas se tornaron de un color carmín y luego volteó apresurando el paso hasta llegar a su grupo los cuales por gran casualidad iban a entrar al local.
Fuck
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