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KYA

Frío es lo que siento, dolor en cada parte de mi cuerpo,  el frío se cuela enteré mis huesos haciendome temblar, y cada espasmo causado por el mismo intensificaba el dolor en todas cada una de  mis heridas.

Con cuidado de no lastimar más mis heridas, intente ponerme  de pie, fallando en ellos primeros tres intentos.

Han escuchado el dicho " la tercera es la vencida " pues en esta ocasión y con mi cuerpo todo adolorido junto a una herida abierta el cuarto intento fue el que dio resultado pudiéndos mantener el equilibrio y como pude salir de la espesura del pequeño bosque que había en el parque, con la ropa destrozada y pasos tambaleantes salí del parque, con mis pies desnudos tocando directamente el frío asfalto de la acera, dificultaba mi caminar pero como pude llegue a casa.

Con las manos temblorosas logre abrir la puerta principal, con lentitud la cerré  y camine en dirección a las escaleras, al tratar de subir el primer escalón una punzada de dolor que clavó en mi vientre, abdomen bajo y pierna haciendo más difícil la tarea de subir a mi habitación.

Una vez Conseguí llegar a mi habitación,  fui al baño cerrando la puerta  con seguro detrás de mi y al alejarme un poco en el espejo,  vi lo que quedó de mi, estaba hecha un desastre con la ropa destrozada, la cara llena de golpes y un corte que a hora puedo detallar más, el mismo va desde mi clavícula hasta mi ceno, eso llevará unos cuantos puntos.

Me aleje del espejo, no quería seguir viendo lo que ellos dejaron de mi, con delicadeza retire las prendas de mi  cuerpo, abrí  la ducha dejando que el agua caliente me mojará por completo y lavando con cuidado cada herida tratando de no agravarla, cuando terminó de bañarme la herida en mi clavícula ha dejado de sangrar un poco asi que saco el botiquín de primeros auxilios preparándome para la peor parte, insertar la aguja en mi carne viva para cerrarla.

Con mi vista en el reflejo de la herida empecé a coserla sintiendo el filo de la misma entrando y saliendo de mi piel cada vez que hacía una puntada, cuando termine de hacer los puntos en las heridas fui a la habitación me metí a la cama tratando de conciliar el sueño, pero cada vez que cerraba los ojos sus rostro y lo que me hicieron regresa a mi mente, no se en que momento sucede pero supongo que en algún momento de la madrugada me quedé dormida y sólo esperaba en lo más profundo de mi no volver a despertar

YA  NO SOY ESA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora