Eres mi esposa

Situaciones que debo superar

🍃💖Eres mi esposa 💖🍃

Capítulo 2

Fue una sorpresa para kagome despertar y ver que el hombre a su lado algunas lágrimas cayeron por sus mejillas mientras tapaba su cuerpo con una de las sábanas.

— «Mi virginidad» -pensó ella mientras acurrucaba y se desahogaba silenciosamente.

Aquel hombre abrió los ojos lentamente notando la presencia de la chica que se encontraba a su lado

—¿Tú quién eres?–preguntó seriamente mientras se incorporaba.

Ella se mantuvo silenciosamente mientras levantó la mirada que reflejaba tristeza.

— Soy Kagome Higurashi– respondió con voz temblorosa.

Aquel hombre se levantó mientras tomaba la otra sábana y se dirigió al cuarto de baño pero antes de ingresar al cuarto de baño volvió hacia ella y comentó.

— Espera aquí un momento –el ingreso al baño mientras ella sólo lo observó en silencio.

— «¿Qué hago?» –se preguntó ella mientras miraba nuevamente su cuerpo y se ponía de pie y empezaba a recoger su ropa.

aquel hombre salió del cuarto del baño ya vestido y la miró seriamente sin mostrar ningún interés o preocupación por la chica le entregó un sobre.

— Esto es para ti por lo de anoche –comentó mientras dejaba el sobre, sobre la mesa y salía de la habitación sin decir nada más.

Ella sólo terminó de cambiarse y salió de la habitación dejando el sobre atrás y con ello los recuerdos de esa noche.

Ya han pasado tres años desde ese día, aquella joven de 22 años se preparaba para un día más de trabajo en su nueva empresa que hace poco había ingresado.

— ¡Kagome! –gritó una joven de ojos marrones y cabello castaño que se acercaba a ella con una sonrisa.

Ella la volteó a mirar y sonrío dulcemente y se acercó a ella.

— Sango, vamos llegaremos tarde y tengo entendido que el nuevo jefe es algo amargado

La chica de ojos color chocolate sólo puedo soltar una pequeña risa por el comentario de su amiga mientras empezaba a caminar.

— Te quería preguntar algo– exclamó la chica de ojos marrones y cabello castaño mientras la miraba con una tierna sonrisa

La de ojos color chocolate la miró con curiosidad mientras asintió.

— Dime Sango…

— Nunca me contaste que pasó con él bebé…

Esa pregunta le hizo recordar aquella noche pero ella mantuvo una sonrisa aunque no era verdad era le contestó de manera tranquila su amiga.

— Lo perdí –contestó sincera mientras veía su amiga con una sonrisa

Continúa