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Draco Malfoy. 01 de Septiembre, 1996.
Bajo del tren y siento una presencia detrás de mí cuando subo a las carretas que me llevarán a Hogwarts. Pansy se sienta a mi lado cuando yo lo hago y se recuesta en mi hombro.
Blaise reprime una risa y yo le doy una mala mirada. Éste idiota.
—Estoy ansiosa por llegar a Hogwarts. —oigo a Pansy susurrar.
Pansy era mi novia.
—La verdad es que yo no quería volver. —le respondo.
—Ay, Draco, te la pasaste diciendo eso en todo el viaje en el tren. —se quejó.
—Es la verdad.
—¿Y por qué, Draco? —se burla Blaise.
—Simplemente siento que el nivel educativo ya no es el mismo, Dumbledore es un idiota, o al menos eso dice mi padre. —me encogo de hombros y la cabeza de Pansy se eleva ante mi acto.
Nadie dice nada en lo que resta del camino. Yo centro toda mi atención en el trayecto.
Unos minutos más tarde llegamos a Hogwarts, Pansy se levanta y yo voy detrás de ella. Blaise la ayuda a bajar y empezamos a caminar hacia el Castillo.
Después de ponerme la estúpida túnica del uniforme, entro al Gran Comedor; aquí es donde se llevaban acabo todos los banquetes del colegio, desde el banquete de bienvenida hasta el banquete de fin de curso, todos.
Cuando me siento en la mesa noto que Blaise tiene la mirada fija en alguien, y una estúpida sonrisa tonta amenaza con salir. Con interés dirijo mi mirada hacia donde está la de él y me topo con una chica, una castaña de ojos grises que habla alegremente con un chico extremadamente parecido a ella.