"Con mucho amor"... -Emerson.

Capítulo 1. Nuestro comienzo.

Chloe González. Era una niña de tan solo 19 años cuando la conocí. ¿Por qué una niña para mí? Bueno... siempre era alguien que confiaba de todo el mundo. Era amable, divertida, con una sonrisa y un cuerpo encantador. Era de bromear mucho. Pero arriba del escenario era toda una verdadera y grande artista y cantante. Bailaba de acá para allá, y hacía sentir a todos sus fans como una verdadera amiga para ellos. No solo en el momento, si no para toda la vida.
Yo con tan solo 22 años de edad, miraba como cantaba con mi hermano Remington Leith y yo en la batería. Me divertía tanto mirarla como hacía sentir a todo el público con ese ambiente familiar y feliz.
Una vez recuerdo que ella admiraba a la gente que seguía sus sueños. Entonces, subió a una niña que quería ser cantante como ella. Y le dijo "Vas a ser grande". Y así era con todos. Amable, tierna, amorosa, sensible... Confiaba mucho de todo el mundo. Nadie para ella era malo. Todos eran buenos y especiales. Tal vez por eso ella terminó así. Yo le advertí, juro que le dije que no confiaba en esa persona...
Tenía muchos sueños por delante. Era una verdadera estrella. Para sus conciertos ella hacia su propia ropa. Y así fue como brillaba pero a su manera. Gracias a ser diseñadora también, pudo abrir su último sueño, una tienda de ropa con su propia marca.
Fuera del escenario era la misma persona humilde y divertía a todos de la misma forma. No le gustaba la gente negativa. Y si se le acercaba una persona así, ella bromeaba o jugaba a hacer retos, como copiar algún movimiento que hacía ella o algo parecido. Era increíble como era. Era mucho para este mundo lleno de maldad y odio.
Sus canciones llegaron lejos, ya que antes de cantar con mi hermano y todos nosotros, ya estaba en el mundo de la música desde niña. Gracias a su padre.
Digamos que, yo no tuve la obligación que tenía ella con seguir la música. A veces me decía que estaba con mucha presión. Entonces yo la abrazaba y salíamos a dar un paseo solos. A escondidas de su padre. Porque no aceptaba que ningún chico se le acercara para enamorarla y así supone él dejar todo lo que había hecho y logrado con la música.
Pero yo era tranquilo en ese sentido. Dejaba que brillara, que sea ella, que sea esa chica que con su sonrisa hermosa hacia sonreír a todo el mundo. Tal vez hice mal, no lo sé... Me siento culpable pensando en que no le advertí de la obsesión de las personas con un famoso. Pero nadie estaba preparado para esto... Ni siquiera ella. Menos de alguien de su entorno. De nuestro entorno. De nuestro trabajo. Nadie sabía que esto iba a terminar como terminó. Y dejar un vacío enorme convertido en drogas, alcohol y depresión.