MI-FINAL-FELIZ :)

Final

- Hoy llegará la princesa con sus sirvientes cómo manda la tradición.

- Es cierto, hoy habrá un gran banquete en palacio y cómo siempre no estamos invitados.

- Jong Seong venga, despierta, tenemos mucho por hacer hoy y necesitamos un par de brazos jóvenes para ayudarnos.

Es el día en que las familias se presenten formalmente y para preparar la ceremonia matrimonial, la futura reina deberá mudarse al palacio del príncipe cómo manda la costumbre real.

- Eunseung preséntate.

- Mucho gusto reina Yang, soy Eunseung y quién me acompaña es mi hermano, primogénito de la familia - hace una reverencia.

- Es un placer conocerla reina Yang, mi nombre es Lee Heeseung, hermano mayor de Eunseung y futuro rey del reino Lee - hace otra reverencia.

- Queremos que mi hija de mucha felicidad y un primogénito varón al reino Yang también - dice la madre de ambos que se presentan.

- No lo dudo, es deber de toda reina dejar un legado y así será - afirma la reina Yang.

Los reyes de ambos reinos disfrutan de la comida tras una charla de futuras uniones y acuerdos, hasta estar satisfechos.

Jungwon solo sonríe ligero intentando verse solemne, es lo que le han enseñado y no presta atención a los invitados, es la última vez que podrá ver Eunseung hasta contraer nupcias, pero para él es otra comida más con visita muy lejana.

Una hora después, ya esta entre sus libros frente a su tutor de turno aprendiendo sobre quién sabe qué.

- Amo Yang, es suficiente por hoy, debe acompañarme e ir con el modista para comenzar con su traje para la ceremonia matrimonial.

- Puedo hacerlo mañana, no tengo porque ir hoy.

- La reina Lee encargó las mejores telas de su reino cómo obsequio, sino es de su agrado puedo mandar a conseguir alguna que sea de su gusto, Amo Yang.

- Sólo no quiero hacerlo hoy, otro día será - ignora el tema con desdén - ahora debo ir a aprender cetrería - dice feliz dando un gran cambio y se retira de esa habitación casi corriendo.

Cetrería es por lo que espera todo el día, criar aves no es algo a lo que se dedicaría, pero pasar tiempo con aquel que le enseña es lo que más le gusta hacer.

- Hoy llega temprano, cómo siempre - sonríe.

- Me satisface ver águilas devorar palomas, ya te lo he dicho.

- Muy bien Joven Amo Yang, voy por su águila favorita.

- Lo estaré esperando Joven Jong Seong - le sonríe de vuelta.

Se alejan varios metros más allá del establo dónde se guardan a las águilas y siguen caminando hasta llegar al lado del campo agricultor. El clima esta soleado pero no por mucho tiempo, después de dos horas soltando el águila al viento, el sol empieza a descender.

- ¿Deberíamos montar a caballo?

- Si así quieres lo puedo traer para ti.

- Mejor vayamos al lago, prefiero refrescar mi piel en el agua.

Caminan hasta el lago de siempre, Jong Seong le coloca la caperuza en la vista y ata al ave en el árbol, se acerca al pequeño príncipe y retira el guante de piel que lleva en la mano derecha suavemente, sirviéndole cómo es su obligación.

- Esta por atardecer, entremos al lago.

Pero su servidor no puede retirar su propio guante de su mano, intenta tirando de cada uno de los dedos y no sale, esta atorado.

- Espera, puedo ayudarte.

Yang frente a él apresura tirando desde la muñeca del contrario que no se desprende, tira uno, dos, tres y la cuarta vez es lo suficiente fuerte para vencer la fuerza de Jong Seong, haciéndolo caer sobre él y el pequeño cayendo sobre el césped.

Se miran directo a los ojos y ninguno se mueve, después de unos segundos Yang abre ligero su boca pero antes que pueda decir algo Jong Seong acerca su rostro hasta rozarle los labios y es el príncipe Yang quién captura su aliento en un tierno beso, entrelaza sus manos al rededor la su espalda y el que esta sobre él toma de su rostro con una de sus manos acariciando su mejilla.

El crepúsculo tinta un fondo romántico para la pareja que no deja de besarse, sienten las manos frías a pesar de no haber entrado al agua y sus rostros cálidos sin necesidad de tomar una gota de licor, la puesta de sol esta por desaparecer y sus labios siguen en apasionado contacto, nadie piensa en si hacen lo correcto o no, sólo una persona a lo lejos no puede aceptar lo inaceptable. Se a visto la escena entera lamentable y repudia tal acto de desvergüenza aún cuando ya se prometió en matrimonio con su menor hermana.

Se jura por su familia que lo humillará aún peor.

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