Como niños (Countryhumans y lectora) {ONU × lectora}

025

—¿Enserio vas a ir?— Pregunta ONU apoyado en el marco de mi habitación.

—ONU solo será un momento.

—Como ayer ¿no?— Lo miré, haciendo que él desviara la vista y suspiré.

—Solo quiere hablar de lo que ocurrió ayer. Además, necesito hablar con él y asegurar que no diga nada.— Me acerqué y quedé delante suya. —Cuida de la casa ¿si?— Él solo asintió.

Pasé por su lado agarrando las llaves de casa y salí, bajando las escaleras rápido tratando de entrar un poco en calor también. Al pasar la puerta de entrada pude ver a Lucas de espaldas que al escucharme se giró.

—Hola...

—Hola.— Contesté acercándome. —¿Querías hablar no?

—Sí... Podemos caminar mientras si gustas.

—Claro.— Los dos comenzamos a caminar en un silencio un tanto incómodo.

—¿Cómo vas?— Me encogí de hombros.

—Bien... ¿Y tú?— Ahora fue él el que se encogió de hombros.

—Estoy... Extraño... No sé... Yo- Yo quería disculparme con el comportamiento que tuve ayer... Normalmente no soy así pero mi mente se nubla. Soy muy impulsivo y no pensé en que tal vez estarías incómoda...

—Bueno, entiende que sí estuve incómoda, pero me di cuenta que paraste antes de que, bueno ya sabes...

—Sí tu pequeño secretito...— Los dos nos callamos. —No espero que lo aceptes pero, solo quería saber como estabas y disculparme por mi comportamiento retrógrado.

—De acuerdo sí... Al menos sabes que lo que hiciste está mal.— Él asintió. —Está bien mientras no suceda de nuevo.

—Sí lo prometo. ¿Amigos?— Hizo un puño con la mano a lo que yo choqué con él.

—Amigos.— Cada uno metió las manos en su respectivo bolsillo de nuevo. —Y bueno, yo debo agradecerte que no dijeras nada acerca de, bueno, tú ya sabes.

—Sí...— Dijo haciendo una mueca.

—No enserio. Con esto de las recompensas la gente está como loca por encontrarlos y cobrar el dinero... Son muy rastreros, y lo peor es que no entienden que aquí hay gato encerrado. De todas formas.— Me interrumpí ya que me estaba desviando del tema y paré para mirarlo. —Gracias por no contarlo. Ellos también te lo agradecen.

—Aaahhh para ya... No puedo más.— Llevó la palma a su rostro. —Me estoy sintiendo como una mierda _____.— Extrañada lo miré.

—¿Qué? ¿Por qué?

—Yo... Esto... Yo...— Flexioné un poco el cuello para que prosiguiera. —¡Ahh! Te estaba entreteniendo _____.

—¿Qué?— Me alejé un poco de él.

—Te he llevado hasta aquí porque les dije a las autoridades sobre los países.— Comencé a negar.

—No...— Me alejé. 

—Yo lo siento mucho _____.— Sentí como las lágrimas se acumularon en los ojos, haciendo que mi visión se hiciera borrosa y mi respiración se agitara. Quise salir corriendo pero me agarró de la muñeca.