Los Mensajeros de la Muerte

#3: Una Rosa Blanca en el desierto

(Este capítulo no está narrado por Lance, asi que todo será contado por un narrador)

Las rosas que había en la antigua base de Angel Valentine se habían convertido en marchitas y grises. De tan descuidado que estaba el ambiente, arena había comenzado a surgir de la nada. El lugar parecía un desierto de arena blanca lleno de flores marchitas.

El paisaje  era desolado y triste, con un débil vientecillo soplando tenuemente. El cielo nublado y oscuro, dando entender que era de noche, mientras que por algunos momentos, la luna, en forma de Rosa Blanca, dejaba ver su hermosa imagen durante algunos segundos. La Rosa blanca que relucía en el desierto, algo así era su perfecta descripción.

Un hombre caminaba lentamente por el desierto de la antigua base de la Muerte de Primavera. Venia vestido de un elegante traje, peinado elegante, hasta su mirada elegante. Venia fumando un gran puro y grandes nubes de humo salian de su boca cada vez que expulsaba aire:

-Mierda- se quejó con una gruesa voz -¿Por qué Angel tenía que poner su base hasta al carajo? Definitivamente, es demasiado cansado viajar hasta allá-

El hombré soltó otra gran bocanda de humo y suspiró fuertemente:

-Creo que de todas formas esto vale la pena- dijo mirando al piso, pero después sus ojos se pusieron rojos de coraje y comenzó a patear el suelo:

-¡Estúpido Angel!- gritaba mientras nubes de arena se levantaban a su alrededor -¡Solo a él se le ocurre poner su base tan lejos de la entrada a este maldito lugar!-

Su discusión con el mismo se detuvo cuando, de entre las nubes, se asomó la luna con su forma de Rosa Blanca:

-Bueno, el caminar por estos lugares al menos me da el privilegio de ver algunos paisajes tan hermosos-

De repente, por detrás, un gran vehículo levantaba gigantescas nubes de arena mientras un ensordecedor rugido de su motor llenaba todo el silencio del lugar. El hombre elegante lo miró indiferente mientras avanzaba por el desierto. De repente el vehículo se detuvo a lado de el hombre y un joven, con una gran sonrisa y pelo blanco alborotado se asomó por la ventana:

-¡Yo!- gritó el joven -¿Usted es el nuevo integrante de la banda de Angel Valentine?-

-Si- dijo el hombre elegante –Si soy el miembro de la… banda de Angel Valentine como ha dicho usted-

-¡Ja, genial!- gritó el joven entusiasmado -¡Me encanta torturar a los nuevos!-

-Déjeme decirle que no soy alguien a quien torturara fácilmente- dijo el hombre dejando salir una gran nube de humo –Además, cualquier atentado contra mi terminara con su cabeza aplastada bajo mis pies-

El joven se empezó a reir como loco:

-¡Asi me gusta nuevo! Por cierto, no se su nombre ¿Cómo se llama?-

-Mi nombre es- el hombre suspiró fuertemente antes de hablar –Daniel Valencia—

-Mi nombre es…-

-No me interesa saber su nombre- le interrumpió Daniel –Solo quiero llegar a donde esta Angel y sus otros compañeros-

-Estúpido- vociferó el joven –Oiga, ¿no quiere un viaje rápido con mi nave?-

Daniel Valencia, que era algo arrogante en cuanto sentirse ayudado por otros no declinó ante esa oferta. Subió a la nave y esta comenzó a deslizarse por todo el desierto, levantando grandes cantidades de arenas y rosas marchitas. La Rosa Blanca seguía iluminando su camino algunas veces.

A lo lejos, se vio una gran torre, rodeada de un domo de piedra y unas torres mas pequeñas por debajo. En letras grandes estaba escrito el nombre de la instalación: Springs Lobby.