SURRENDER | DRACO MALFOY ✓ [X]

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Ella era su gracia salvadora.

[...]

Después de media hora de intentar despertar a sus amigas, se rindió y caminó penosamente hacia la sala común de Slytherin.

Se encontró parada afuera de la entrada, como lo hizo hace un par de días cuando Hermione la engañó. Pero esta vez se sintió más ansiosa que nunca por alguna razón. Ella curvó sus manos en puños y murmuró la contraseña, caminando con cautela por el frío y estrecho pasillo.

Nunca dejaba de sorprenderla el contraste entre la sala común y la entrada. Mientras que la entrada estaba fría, oscura y casi húmeda; el área común era cálida y menos intimidante.

Pero ella no dijo que no era intimidante.

Después de subir las escaleras hacia los dormitorios, se acercó a la puerta de Pansy y escuchó el murmullo de un pequeño grupo. Golpeando con los puños la puerta de madera, se hizo a un lado y esperó a que alguien abriera la puerta.

Escuchó algunos movimientos y la puerta se abrió, revelando a Pansy sorprendida pero aliviada.

—¡Brynn! ¿Dónde estabas?.—Exigió, sin perder tiempo en agarrar el brazo de Brynn y tirar de ella.

Brynn murmuró una disculpa y miró a su alrededor para ver a sus amigos sentados en círculo, riéndose de algo que Ron había dicho.

Se alegró de verlos a todos allí; Harry, Ginny, Cho, Hermione, Ron, Blaise, Pansy, Theo y...

La respiración de Brynn se detuvo cuando vio a Draco sentado en el suelo junto a Theodore, escuchando atentamente lo que estaba diciendo. Claramente no se molestó en cambiarse a otra cosa como todos lo hacían; todavía usando los pantalones negros los de antes.

Pero Brynn no pudo evitar notar los primeros botones de su camisa desabrochados, mostrando la suave piel de porcelana debajo. Un gran contraste con el color que tenía puesto y a Brynn le encantó. Se pasó la lengua por los labios cuando vio que él se subía las mangas perezosamente hasta los codos y que los dedos jugueteaban inconscientemente con sus anillos.

Oh, cómo le encantaría que esos anillos dejaran marcas en su piel.

—Siéntate junto a Draco.—le ordenó Pansy, dejándose caer junto a Blaise. No se perdió la sonrisa de complicidad que Pansy y Hermione lanzaron una frente a la otra, pero instantáneamente se olvidó de ella cuando se dio cuenta de que Draco había dejado de escuchar lo que fuera que Theodore tenía que decir y tenía su mirada fija lentamente en ella.

Sus ojos grises brillaron mientras sonreía y se inclinaba hacia atrás, esperando que ella se sentara a su lado. Brynn tragó saliva de forma audible y obligó a sus piernas a moverse. regañándose mentalmente por su incapacidad para mantenerse unida a su alrededor.

Dejó escapar un suspiro y se sentó, ajustándose la falda mientras lo hacía.

—¡Brynda!.—Theo exclamó con júbilo, inclinándose hacia adelante para enviarle una gran sonrisa.

Brynn se rió y miró a Theo con los ojos en blanco.

—Realmente tienes que dejar de llamarme nombres que no son míos. Quiero decir, ¿de dónde vino Brynda?

Theo movió las cejas y envió una sonrisa al rubio sentado entre ellos, que estaba ocupada frunciendo el ceño al suelo por alguna razón.

—Pienso mucho en ti.—bromeó.—¡Por eso se me ocurren tantos nombres para ti!

La cabeza de Draco se levantó de golpe y envió una mirada fría en dirección a Theo.

—Cuidado, Nott.