Capítulo Uno: Salvados

1.6K 64 0
                                    

CAPÍTULO UNOSALVADOS

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


CAPÍTULO UNO
SALVADOS

     EL HELICÓPTERO HABÍA APARCADO EN un sitio, en donde nos dijeron que estaríamos a salvo. Nos indicaron que teníamos que bajar. Thomas fue despertado por Minho. Había unas grandes puertas que estaban abiertas y también se escuchaban disparos y gente corriendo, pero estaban raros, de movían de una manera extraña. Llegamos a las puertas y entramos en estas, había gente haciendo cosas, era como un taller, las puertas se cerraron.
Luego de eso nos llevaron a un cuarto, en donde había varios materiales, nos acomodamos en donde pudiéramos, nos dijeron que teníamos que esperar a un hombre, quien nos daría el recorrido, al parecer era el dueño de todo este lugar. Pero antes, comimos como nunca. Una mesa larga con comida de todo tipo, incluso comida que Sartén jamás había hecho.
Luego de uno minutos, la puerta fue abierta dejando ver a un hombre, rápidamente todos nos acercamos a el.

—¿Están todos bien? —preguntó el hombre mirándonos a todos—. Perdón por la conmoción, nos atacó una horda.

—¿Horda de qué? —pregunté sin entender.

—De Cranks —respondió con simpleza. Nos miramos entre sí, no sabíamos que eran Cranks—. Son personas que fueron infectados por el virus.

—¿Usted quién es? —inquirió Thomas.

—Soy la razón por la que siguen con vida, y pretendo mantenerlos así. Ahora vengan conmigo, les vamos a dar asistencia —lo seguimos—. Pueden decirme Janson. Dirijo este lugar. Para nosotros es un santuario a salvo de los horrores del mundo y del mundo exterior, tomenlo como una parada de descanso, una especie de hogar temporal jóvenes, tenga cuidado —dijo señalando arriba, caían chispas.

—¿Nos llevará a casa? —preguntó Thomas.

Era todo lo que nos importaba en este momento.

—No, a una especie de hogar —aclaró mirándolo un poco —. Por desgracia no queda mucho del lugar de donde vienen, pero tenemos un lugar para ustedes, una especie de refugio, lejos del desierto, donde CRUEL no los volverá a encontrar, ¿les gusta la idea?

—¿Por qué nos apoya? —cuestionó esta vez Minho.

—Digamos qué el mundo exterior está en una complicada situación, todo cuelga de un hilo extremadamente delgado, el que hayan sobrevivido a ese virus los convierte en la esperanza de toda la humanidad para evitar su extinción, por desgracia, también los convierte en un blanco, como seguramente ya lo notarán ——llegamos a una puerta—. Pasando ésta puerta, está el comienzo —ingresó una tarjeta— de sus nuevas vidas —se abrió la puerta dejando ver un gran pasillo enorme—. Primero lo primero, hagamos algo con ese mal olor.

Nos llevaron a unos baños en donde habían regaderas. Entré a una y me desvestí dentro de esta. Abrí la llave dejando que el agua cayera sobre mi cuerpo mojandome. Me eché Shampoo y pasé el jabón en todo mi cuerpo. Cuando terminé, me sequé y me puse ropa nueva que me habían dado. Unos pantalones de mezclilla y una blusa de color negra de manga larga. Salí y nos llevaron a una sala en donde habían camillas y al parecer doctores. A mi me dijeron que tenía que esperar pues me harían unos exámenes para ver si me encontraba bien. Minho estaba en una caminadora. Newt al parecer le estaban inyectando algo. Thomas le estaban sacando sangre. Teresa estaba a mi lado. Una doctora llegó a mi lugar al igual que otra doctora llegó con Teresa.

𝗧𝗵𝗲 𝗠𝗮𝘇𝗲 𝗥𝘂𝗻𝗻𝗲𝗿: 𝗣𝗿𝘂𝗲𝗯𝗮 𝗱𝗲 𝗙𝘂𝗲𝗴𝗼 ╭𝗣𝗮𝗶𝗻╯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora