Ruinas Lascivias [PAUSADO]

Capítulo 0: La llegada a las ruinas

Un lugar lóbrego en el que pareciera que ni la luz de la luna alcanza esta zona, como si no fuera digna de su claridad; iluminándose débilmente con una antorcha hecha por la protagonista, donde no se puede reflejar otra cosa más que la pinta tenebrosa y lúgubre, rozando lo siniestro de las ruinas y se observa una pequeña figura enfrente de las enormes puertas reforzadas, observando intranquilo su alrededor...

En este momento estoy en frente de las inmensas puertas, donde no percibo otra cosa más que pura maldad contenida al traspasar las puertas y afuera de ellas no es distinto, llega a tal punto que a veces logró oír lamentos yacidos en las paredes como si me indicaran que regrese de por dónde vine antes de que sea demasiado tarde, aunque la verdad solo deben ser alucinaciones mías y que aun si fuera cierto, estoy decidida a entrar aunque me cueste la vida. De forma casi inmediata al aproximarme a las puertas, distingo algo:

–Un momento hay algo escrito arriba de los arcos adyacentes con las puertas– notando esto y con una curiosidad inmensa, dejando la antorcha en el piso con cuidado que no se apague y con mi demás equipaje (arco, flechas, provisiones, etc.), me elevo con un hechizo de mí libro, aunque con dificultad, después de todo es un hechizo complejo para alguien de mi nivel; estando ya en el aire, trato de acercarme un poco más para ver si puedo descifrarlo:

"Aquel que entre deberá estar despojado de todo lo conocido, en caso de no hacerlo su consecuencia será perderse así mismo, dando con dos opciones: abandonar su vida o su cordura, recuerde su peor enemigo será usted mismo, una vez ingrese no habrá vuelta atrás".

[Nota de autor: Cabe aclarar que ese es el texto, pero la protagonista tiene el inconveniente siguiente]

–Maldición, esta borroso y casi incomprensible. – "Si no me equivoco está escrito en élfico y aunque es lenguaje básico en nuestro reino o al menos no es tan difícil conseguir aprenderlo, ya que tanto mi papá como mi mamá lo sabían, bueno mi madre más que mi padre por cuestión de hechizos y magia, y que también cuando me lo enseñaron no le puse mucha atención, básicamente le hice caso omiso por pereza".