Bromas de Cupido

Olivos y Gemas| Especial de Año Nuevo - Parte 2

Un gran estruendo resuena en toda la cocina. Jem se retuerce dolorido y cae.

Ya sacaron el arma máxima, las balas de harina de tía Elise.

Tía Elise es demasiado amable pero tiene un solo defecto, se le da demasiado mal cocinar, lo que favoreció las malvadas de la cocina que no existe plato que no les salga bien. Es como la ruleta rusa, quien termina eligiendo los platillos de Elise (Se ven bien pero saben horrible) come sin rechistar o mosquearse, sino romperíamos su delicado corazón.

Ahora están lanzando sus pastelitos, de los cuales no me puedo imaginar cómo rayos logro que incluso el glaseado sea duro como mármol.

Me reacomodo el casco de americano y me muerdo la lengua.

¡Sabía que tenía que comprar el equipo entero!

Un pastelito le da en la cabeza a Jem y cae como tabla, eso le pasa por presumir que podía sin casco. Los mellizos Rey y Reina le sacan una foto y murmuran

- Eso se debe evitar

Me dirijo a las hornillas y le subo la intensidad al fuego. Mika es incapaz de dejar pasar el detalle y se da cuenta de mi intervención; sus pasos resuenan cerca de la cortina y no me encuentra, punto para Gemma.

Jem amenaza verter en la sopa una mezcla de picante con mostaza en uno de las ollas grandes, y aprovechando la confusión meto cada celular al delantal que estoy puesta.

Nadie cuanta con nuestra arma secreta.

- Ahora Gemma! – grita mi hermano y le lanzo una pistola de agua, grande y común, con el contenido más alucinante posible.

¡Caramelo derretido!

Jem la agarra al vuelo de una manera épica y les apunta al cabello, yo por detrás hago lo mismo y le lanzo la segunda así tiene una pistola en cada mano. Estas refunfuñan y bajo nuestra atenta vigilancia bajan la intensidad del fuego, nadie quiere comida quemada; me percato de algo.

Elise está revolviendo su saco.

- Sus teléfonos celulares están como rehenes en este asalto, sin contar que Chloe precisamente en este momento está siendo perseguida por abejas furiosas – dice resuelto mi hermano y saco mi celular.

- Tengo la evidencia, mi novio acaba de grabarla.

En la imagen se puede apreciar a la tía Chloe corriendo como si la vida le fuera en ello, con los tíos tratando de ahuyentar o exterminar abejas al mismo tiempo de que Oliver graba todo. Es era exactamente mi misión, mancharles de miel para tenerlos ocupados.

- Espero que se demuestren cooperativas con nuestras exigencias. Y a que en realidad – extiendo mi brazo a la olla de sopa que mide como un metro y pongo sobre ella el delantal moteado – sus celulares la pagaran.

James llama sucesivamente a cada celular y resuenan conforme los marca, jaque mate.

- ¿Exigencias? – pregunta Tía Sally, me sonrió y les digo – El peso de Chewie en dulces. Chewie es el yorkie de los primos Rey y Reina.

- Eso para nuestros primitos, para cada uno – recalca Jem – Nosotros pedimos el peso de Gold en comida – Gold es el Golden Retriever.

Nos entregan la bolsita, y nuestros primos lo agradecen pese a no formar parte del asalto, la abuela encarga algo a nuestra mamá y nos llama al depósito. Al fin, el verdadero premio.

Si logras asaltar la cocina ganas el apoyo de Mika, quien tiene depósitos en todas las casas Myers con artefactos de broma desarrollados por ella y solo ella tiene la llave. Con el apoyo de Mika apareceremos en la pared inmediatamente.

Mika nos deja pasar al oasis del cuartito, cajas por aquí, cajas por allá. Bromas por todas partes.

Nuestra abuela cierra el cuartito y se sienta en la única silla disponible que no sea de broma, alisa su delantal y pregunta.

- ¿Qué travesura están maquinando mis niños? Ese tal Oliver es solo carnada de mis querubines favoritos – la abuela es demasiado sabia, punto en contra.

- ¡Misterio!– responde mi hermanito – ¿Nos das el producto 1056 y 2570?

Con los paquetes en nuestro delantal de guerra le besamos en ambas mejillas marchándonos al instante.

...

A lo lejos Oliver escoge la silla más próxima a la de Gemma susurrándole algo al oído. Ella se encoge de hombros y murmura maldiciones.

El plan que pusimos en marcha hace cuatro meses da frutos y debíamos cumplir muchas metas en su práctica.

El estado actual es: Dos éxitos y un fracaso.

Comemos la cena con un silencio abrumador dado el ánimo de Géminis Burlón y la tía Chloe; cada uno se sienta en la alfombra y pasan el detector de explosivos en los regalos de la abuela y abuelo, ya que sin importar cuantos años pasen seguirán siendo el dúo explosivo.

Son las once y se comienzan a abrir los regalos.

- Oh! – Exclama alguien, Gemma.

Voltean a ver que es pero un escalofrío recorre mi columna al ver sostener a Oliver un anillo cerca de ella, a todos les ocurre algo parecido.

Luca rechina los dientes y aprieta los puños, Luke saca la funda de una pistola decepcionado por no tener la pistola allí, Chloe estruja las medias tejidas de la abuela. Mi padre está apunto de desmayarse y mi madre se muerde las uñas por no haber encendido la cámara antes.

De los demás su reacción es de sorpresa e incredulidad, volteando sus miradas a mi reacción.

- Si me nombras padrino no tendré tanto problema con eso – finalizo y me estruja la mano amistosamente, retirándola después algo adolorido. No presione demasiado fuerte.

Abre la cajita y un precioso anillo con una gema en el centro reluce con orgullo.

- No está en mis planes casarnos en un futuro inmediato como malinterpretaron tus parientes, es una promesa de que estoy dispuesto a caminar todo el camino de la vida a tu lado. Te quiero demasiado Gemma, y quería hacer una locura de película en esta ocasión pero las palabras sobran y los actos se sobrentienden ¿Aceptas?

Coloca el anillo en el dedo de Gemma. Acerca su boca peligrosamente a la par de mi hermana.

Caos

Los tíos tratan de levantarse pero están pegados, les muestro el bote de pegamento burlón y refunfuñan.

- Nuestros caminos estarán siempre juntos Oliver, como amigos claro.

Oliver sonríe y ambos se abrazan, Gemma muestra el anillo en su índice y papá se desmaya.

Yo disparo el confeti y mezcla de tinte, huevo podrido y queso camembert rallado cae sobre ellos.

Todos tienen el símbolo de interrogación sobre sus cabezas y sonreímos pletóricos haciendo reverencias en todo ángulo.

- ¡Los Cupidos Imparables no olvidamos! – exclamamos ante su estupefacción.

La venganza fue de tres aunque no pareciera, Elise se nos unió y más tarde la abuela.

Nuestros primos Rey y Reina, hijos de Elise, cooperaron demasiado.

¡Cupidos imparables aparecerá en la pared!

Liz:

¿En qué contribuyo Elise?

Ivy aparecerá muchísimo más adelante, tal vez

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Hasta la próxima!!!!

Historical History se despide