Capítulo 8

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   Johan me explico como iba a ser el viaje. Si todo iba bien tardaríamos en llegar 3 días. Por suerte habíamos traído suficiente comida entre los dos para esos 3 días.
   Cogimos el barco de madera. Mi primera impresión al verlo fue muy buena. Un barco de madera bastante grande con timón y habitaciones. Es muy raro que nadie lo haya descubierto. Subimos al barco y entramos al mar. A medida que íbamos entrando en alta mar, me ponía más contenta. Esa sensación de vivir una aventura de verdad, esa sensación de felicidad extrema nunca la había vivido. Se veía a Johan muy feliz, no paraba de sonreír y reír por cualquier cosa. Me explicó que la islote estaba abandonado porque era muy pequeño para una población de verdad.
   La verdad es que ahora si me hacia ilusión ir. "Aprovechare este viaje para conocer a Johan" me dije a mi misma.
   -Bueno, ¿y qué te hizo cambiar de instituto?
  -La verdad es que yo no quería cambiarme, pero me mude y mi antiguo instituto quedaba muy lejos. Perdí a todos mis amigos y entre ellos a mi novia.
   -¿Cómo que los perdiste?
  -Sí, llevar una amistad a distancia es algo complicado y no te digo una relación.-contesto sin quitarse la sonrisa de la cara.
   -Pero podrías quedar con ellos y tal.
   -No es tan fácil. -me dijo. Iba a continuar la frase pero vi que había desaparecido esa sonrisa de la cara. Será mejor que no sea tan curiosa.
Oí como sonaba mi tripa y Johan también lo debió de oír porque soltó una carcajada.
   -Enseguida comemos.
   -Menos mal, voy preparando la comida.
   -Yo la mesa.- dijo Johan mientras abandonaba el timón.- El mar esta muy tranquilo hoy, si sigue así todos lo días llegaremos en menos que canta un gallo.
   -Eso espero, porque si ya me estoy empezando a aburrir ahora no quiero pensar como estaré en el segundo día.
   -Me imagine que te aburrirías, así que te traje este libro.- Saca de una de sus mochilas un libro bastante grueso y me lo lanza.- Ahí están los manuales para hacer nuestra casa, aunque primero dormiremos en una tienda de campaña ya que tendremos que buscar el material.
  -Me parece muy bien. Me voy a estudiar el libro para que podamos construir la casa cuanto antes.
Johan sonrió. Nunca le había visto sonreír así, aunque es normal, lo conocí ayer. Aún así me gustaba esa sonrisa. 
  La verdad es que me gustaba Johan. ¿Hasta qué punto? Hasta el punto de haber abandonado a mi familia y a mi mejor amiga por el. Me lo pensé una vez más, ¿Qué estaba haciendo? ¡Me estaba escapando con un chico que apenas conocía a un islolte que según él nadie sabía de su existencia! Estoy loca. Ya no hay vuelta atrás.

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