Capítulo Diez | zeiD olutípaC

980 87 14
                                    


Stand Tall
| Parte Dos |

Julie termina de retocarse su lipstick, nuevamente, para luego observar el reloj de pared con nerviosismo. Flynn viendo a su amiga preocupada.

Aún no tenían señales de los fantasmas y en cualquier momento vendrían a llamar a Julie para comenzar el show. Decir que ambas estaban preocupadas era un poco innecesario.

Por eso es que cuando ambas escuchan los toques en la puerta que sus respiraciones se cortan, la voz de Dylan llamando a la morena les regresa el alma a sus cuerpos.

"¿Puedo pasar?"

Julie voltea a ver a Flynn sin saber que contestar, un sonrojo apareciendo en su rostro al ver la sonrisa pícara que le dedica su mejor amiga.

"¡Pasa!" Grita Flynn.

El rubio entra al lugar vestido con una camiseta blanca con un saco negro encima y unos jeans azules. Julie no puede evitar la manera en que su corazón se acelera al ver la sonrisa que le dedica.

Respira, Julie, se dice a si misma antes de que Flynn salga del camerino con una última sonrisa hacia ella.

"¿Lista para lucirte allá arriba?" Pregunta con una sonrisa para luego observar sus alrededores, "¿Dónde están los demás?"

Julie bufa con preocupación, "No han aparecido. Están bien, ¿verdad? Digo, ¿en que problemas se pueden meter cuatro fantasmas?"

Ninguno de los dos dice algo, dejando que sus miradas al cruzarse respondan la pregunta de la morena por si solo. Muchos, en muchos problemas.

La morena suelta un lamento para sentarse en la silla frente al tocador y poner su rostro en sus manos. Dylan apresurándose a ponerse a su lado.

"No, no, nada de pucheros" le dice mientras levanta su mentón "Van a aparecer, ya verás. Ambos sabemos que no se perderían esto por nada del mundo"

"¿Y si no aparecen?" Cuestiona con tristeza la cantante "¿Qué hago si no aparecen?"

"Sales y les demuestras a todos quien es Julie Molina" le sonríe el rubio, "Eres realmente impresionante, Julie. Con o sin ellos. Si hay alguien que merece cantar sobre ese escenario eres tu"

La morena mira al rubio frente a ella a los ojos sintiendo como las mariposas aparecen nuevamente en su estómago, sus latidos resonando en sus oídos haciéndole saber lo que sospechaba.

Se estaba enamorando del rubio que tanto la hacia reír en clases.

Aunque no pudo meditar mucho la realización al la puerta del camerino ser tocada por uno de los trabajares del Orpheum para avisarle que era momento de salir.

La morena observando con pánico la puerta, Dylan viendo preocupado la hora para luego fijarse en los ojos llenos de miedo de la de rulos una vez ya le responder al trabajador.

"Algo está mal" las lágrimas comienzan a acumularse en sus ojos café "Estaban recibiendo estas horribles descargas antes de irme. No me dejarían plantada de nuevo. Se les tuvo que haber acabado el tiempo"

La morena se refugia en los brazos del rubio, quien no puede evitar las lágrimas que aparecen en sus ojos al pensar en cierta fantasma de cabellos castaños que se había vuelto especial para el, sus brazos estrujando a la cantante con fuerza.

ℰ𝒻𝒾𝓂ℯ𝓇ℴ | ˡᵘᵏᵉ ᵖᵃᵗᵗᵉʳˢᵒⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora