Chantaje

Cap 3: Curiosidad

Mirko: encerio lo vas hacer.

Izuku: que pasa conejita, celosa?

Mirko: n-no, que dices idiota.

Izuku: entonces por qué hablas, sobre eso?

Mirko: so-lo qu-e.

Izuku: eres muy celosa conejita.

Decía mientras le acariciaba una mejilla a la morena.

Izuku: no tienes por qué preocupar conejita, nos vemos luego.

Dijo el peliverde para deja a la peliblanca hay, sola.

Mirko: tsk, tonto.

Izuku: (que asco el puto tren,)

Decía el peliverde pasa si mismo, ya que este estaba en el tren, lleno de personas y a este no le gustaba convivir mucho con estás, pero acaso todo esto podía ser malo? El peliverde pudo sentir como algo choco levemente contra su abdomen bajo, este voltio a ver qué había Sido, y grata fue su sorpresa.

Izuku: (valla valla, aquien tenemos aquí)

Dijo para mirar abajo para ver a una peliceleste de largo cabello, y cuerpo voluminoso casi pegada a el por el poco espacio que había en el vagón.

Izuku: (bueno, tenía planes para ti, y ahora me haces las cosas más fáciles)

Al peliverde solo se le pudo dibujar una leve sonrisa, mientras levemente empujó a la peliceleste a un rincón del tren.

Nejire: ugh.

Hizo gestos la peliceleste al sentir como el peliverde se arrepegaba contra ella.

Nejire: (que es esto, acaso es un pervertido)

Se preguntaba la peliceleste un poco como incrédula ante la situación.

Izuku: pero aquí en tengo el placer de encontrarme, a la compañera de la heroína Ryukyu, igual de hermosa como en televisión.

Nejire: qu-e está hacie-ndo.

Izuku: perdona pero verte aquí, se me hace completamente irresistible.

Dijo el peliverde mientras lentamente deslizaba sus manos para tocar los suaves pechos de la chica.

Nejire: ugh, n-no ha-ga eso, si no.

Izuku: si no que? Dime qué me harás acaso usarás tus poderes? Y lastimaras a todas estas personas? Grita y harás que yo lastime a estás persona o simplemente no harás nada  y dejará que yo hago lo mío y me iré.

Decía el peliverde de forma siniestra hacia la chica que pensaba lo que le podía hacer si usaba sus poderes y aúnque gritar fuera lo opcional el peliverde ya había dicho que el lastimaria a las personas, simplemente ella no podía hacer nada.

Izuku: solo...déjate llevar ok?

Lentamente el peliverde deslizó sus manos sobre la ropa de la peliceleste y empezando a masajear sus pechos delicadamente, a la peliceleste le comenzaba a brotar un sonrojo alrededor de toda su cara, el peliverde después de darle un poco de masaje, este desabrochó la camisa de la joven y haciendo que sus pechos quedarán al descubierto

Nejire: no haga-s eso, algui-en podría ver-los.

Izuku: porque? Parecían muy apretadas hay.