𝐈. the sapphire and the diamont

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▅▅▅▅ CAPITULO UNO✶ 💎⠂❛  the sapphireand the diamont❜

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▅▅▅▅ CAPITULO UNO
✶ 💎⠂❛  the sapphire
and the diamont❜. · . · 🌺⋆࿐໋

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       Según dicen, "todas las mujeres tienen lengua filosa, pero las que escriben, son las más peligrosas". De ser cierto, me encantaría que prueben el filo de esta autora.

Me llamo Lady Whistledown.

No me conocen, y les aseguro que nunca me conocerán. Pero les advierto, mis queridos lectores, que yo desde luego los conozco a ustedes.

—Lady Whistledown

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            Anne tuvo que dar pequeños saltitos para quitarse el corsé que venía molestandole desde muy temprano. Su madre correteaba por la habitación, alardeando a las mucamas de la espléndida presentación de su hija. Desde que habían salido del salón, Anne había recibido filosas miradas de las demás jóvenes participantes. Pero para su suerte, no fue la única en ser el centro de atención. Al parecer, Daphne, su leal amiga, había dado una presentación espléndida, recibiendo también el cumplido de la Reina.

No podía estar más feliz, viendo cómo el rostro de su madre no borraba aquella sonrisa de orgullo que no quitó desde que subieron al carruaje.

—¡Doscientas! ¡Doscientas niñas participaron y mi bella hija recibió la aprobación de la Reina! ¿Cómo dijo que fue...?

A pesar de dudar, Anne sabía que Amanda sólo lo hacía para volver a alardear.

—Magnífico, mamá.

—¡Magnífico! ¡Tu presentación fue magnífica!

Si le pusieran una copa de vino, estaba segura de que su madre lo tomaría sin molestarse en ver que era. Su atención iba a estar más allá de aquellas cuatro paredes.

—¡Llegaron los vestidos!—exclamó Agnes, cargando con ella tres perchas. Las mucamas se apresuraron a tomarlas para evitar que cargara con semejantes obras. —¡Son hermosos!

El color característico de los Montgomery's era el rosa. Por lo que no se sorprendió en ver que había dos vestidos de un color similar con hermosos adornos de tul y mostacillas aperladas. El otro vestido era de color crema, casi llegando a ser blanco.

—Son preciosos. —logró decir, por encima de las voces entusiasmadas de Agnes y su madre. Sus ojos se dirigieron a la mano desocupada de la hermana mayor. — ¿Qué traes en manos, Agnes?

GOLDEN | BRIDGERTONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora