Capítulo uno:"El club."

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-¡¡¡Martinaaa!!!- el grito de alguien (que supuse que era de mi mamá) me hizo despertar exaltada. Así que solo me levanté bajé las escaleras y me encontré con ella cocinando, ya que eran vacaciones de verano y no tenía que asistir a clase.

-¿Qué pasa ma?- Ella se dio la vuelta.

-Ya son las 13:30, vení a comer- me dijo con cara inexpresiva.

Bajé las escaleras y caminé hasta la mesa, como yo acostumbraba a hacer, puse la mesa y comimos con mi hermana, la cual antes se encontraba en la computadora .Ella era bastante linda era morocha de ojos marrones, pero tenía una figura hermosa y una mirada tierna.

Hoy íbamos a pasar la tarde en el club .Yo y mi familia (mi hermana y mi mamá, ya que ella y mi papá estaban separados) y mis amigas pasábamos la mayoría de las tardes allí, era genial .Allí pasábamos el tiempo en la pileta jugando al vóley o al fútbol en compañía a veces de personas que solo conocíamos de vista.

Ya habíamos terminado de prepararnos y partimos rumbo al club .Llegamos y, con mi hermana de 15 años, un año y medio mayor que yo fuimos en busca de nuestras amigas, las vimos en una mesa y saludamos a todas cuando llegó el turno de saludar a mi mejor amiga, llamada Isabela, nos quedamos charlando un rato del chico que me gusta, Santiago, y del que le gusta a ella, Francisco, luego de eso nos pusimos todas al día sobre todo y fuimos a la pile.

-Mirá tu “chico” esta allá al lado del muy guapo de Fran- me dijo Isa, yo voltee hacia donde ella miraba, y allí estaba él, hoy se veía muy guapo como de costumbre.

Cuando lo estaba observando él sintió mi mirada y volteo, al cruzar miradas me ruboricé, me di cuenta de que me había sonreído…, cuando él dejó de mirar, mi amiga pasó su mano por delante de mi cara, sacándome de mi transe.

-Tierra llamando a Marti, te has quedado embobada- dijo, y se echó a reír .Me di cuenta que ella no lo vio sonreír sino, hubiese hecho un escándalo.

-¡Ja, ja! Muy graciosa- le dije.

Me volví hacia todas – ¿Y si vamos a jugar un partido de fútbol?-Todas asintieron, entonces Cami, mi hermana, agregó:

-Sí, y el equipo perdedor le paga una Coca - cola a los ganadores.

-Okey, yo, Isa, Lindsay y Sabri contra vos, Cande, Sofi y Mica.

-Bueno sentenció ella.

-A patear sus traseros.- Dije, y todas reímos.

-Sí- respondieron mis compañeras de equipo.

En ese momento todas íbamos caminando, y yo y Micaela habíamos quedado un poco detrás.

-Eres competitiva, ¿verdad?- dijo Micaela, ella nunca me cayó bien, y creo que era mutuo.

-Sí- le dije con una sonrisa satisfecha.

Entonces dicho eso, caminé un poco más rápido y alcancé a las demás.

Un verano complicadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora