Dejarlo atrás

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- ¿Dónde estabas cuando ella murió? ¿¡dónde estabas cuando ella creía en ti y le fallaste!? ¿¡¡dónde estabas cuando tu mejor amigo la mató!!? -

Diaval con ojos de furia y entre lágrimas lo seguía agarrando del cuello y lo estrellaba una y otra vez contra la pared hasta que está estaba a punto de romperse y lo aventó a los escombros de la pared (afortunadamente no había nadie por aquí). Me acercó con Diaval y pongo mi mano en su hombro.

- Diaval... ¿Estás mejor? -

Seguía viendo hacia los escombros, su respiración estaba agitada.

- Si, ya pasó tiempo... Solo debía desquitarme, hay que seguir buscándolas antes que Axe despierte -

Axe seguia inconsciente debajo de los escombros, Diaval y yo seguimos caminando por el pasillo en busca de las chicas pero el lugar se llenó de un gran silencio, sólo pasos se oían, una tras otro... Mi mente se va alejando de este lugar y empiezo a recordar cuando mi madre creo a Artemisa y Apolo.

Hubo una guerra, ya era costumbre los humanos peleando entre si, ya sea por oro, poder o tierras, los humanos solo quieren poseer más sin darse cuenta de lo que ya tienen y de lo que hacen alrededor de su deseo, la guerra día muy devastadora, mi padre estaba alterado no sabía que hacer, trataba de hablar con los líderes pero la necedad de los humanos es muy fuerte, mi padre se empezó a perder en sus propios pensamientos y esto alteró también a la ciudad de plata.

Mi madre decidió poner un alto a esta masacre por la única razón de que mi padre comenzó a mandar a mis hermanos a convencer a los humanos en crear paz, por obvias razones los humanos se negaron y los mataron para obtener su sangre... La sangre de una Ángel puro cura desde la más mínima herida hasta revivir a una persona, mi madre se puso furiosa y suplico a mi padre que parará y el se negó, al ese mismo día se alejo y poco a poco comenzó a crear algo nuevo, al principio quería crear un solo guerrero y después decidió separar su creación dejando a dos guerreros, Artemisa creada con la constelación de sagitario e inteligencia de Athenea y su hermano Apolo creado con la constelación de Orión y la fuerza de Ares, de este modo mi madre creo a los hermanos de la guerra y de la caza.

Una vez que ambos fueron creados los mando a la tierra con el único objetivo de salvar a mis hermanos y poner fin a esta guerra, claro está que esa última petición termino en un casi genocidio, padre estaba furioso con ese par y con mi madre, que en cuanto volvieron a la ciudad plateada mi padre los mando a encerrar al infierno y nunca los volvió a ver, aunque Jäkel y Lilith dejaban que salieran e incluso entrenaban con los demonios Diaval y yo nos hicimos amigos de ellos incluso puedo decir que éramos hermanos, pero el día de la batalla por la ciudad plateada ellos no lucharon, les pedimos ayuda y lo único que dijeron fue "no es nuestra pelea" y se fueron, nunca los volví a ver y me aterra la idea de encontrarlos otra vez.

- ¡¡¡AYUDA!!! -

Se escucho la voz de Forever, pero no sé de dónde proviene.

- ¿Escuchaste? -

Dijo Diaval poniendo una mano en mi hombro para que dejara de caminar.

- Si, es Forever... -

- Debemos encontrarla... -

Me interrumpió, lo más lógico es escuchar el grito y averiguar de dónde viene.

- shhh -

- Hay que... -

- Diaval cierra el osico -

Me puso ojos de muerte pero finalmente se callo.

- ¡¿Hay alguien ahí?! ¡¡AYUD... -

Angeles CaídosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora