~Narras TÚ~
Seguí mi camino buscando esa habitación por casi 10 minutos y nada pasó. Estaba confundida y preocupada. ¿Por qué aún estaba viva en esta casa vacía? ¿Qué estaban esperando? Suspiré en silencio y me dirigí hacia otra dirección hacia otra habitación. Luego me dí cuenta de algo, ¿a quién estaban esperando? Lo supe justo cuando lo pensé.
~Narra Jason~
Le agradecí al cielo y a Dios. Sentí mi corazón latir más y más rápido como si sintiera a _____. Miré alrededor buscando algo extraño o sospechoso, entonces decidí recorrer fuera del pequeño lugar antes de entrar.
Miré un arbol cerca de la casa, casi parecía falso. Entonces me dí cuenta, no había ventanas. Entonces me acerqué a la puerta frontal listo para disparar, en verdad necesitaba llamar a Alan. Me acerqué a la puerta con mi pistola en mis manos.
Hize el intento de abrir la puerta, no se movió nada; miré a mi alrededor una vez más. Tenía el presentimiento en mi interior de que me estaban espiando. Empujé un poco más fuerte y la puerta se abrió más, pareciera que había algo adentro, eso me decía que nadie había salido de la casa como para cerrarla así.
Empujé un poco más y las cosas se movieron del camino, entré y miré estantes y repisas cerca de la puerta, luego la cerré. Caminé por todas las cosas de madera que había, dandome cuenta de que el lugar estaba demaciado sucio. Podía oler polvo, y posiblemente tabaco. Entonces me llegó un olor a gasolina.
De repente, escuché algo caer dentro de la casa, me dirigí hacia la puerta y me detuve justo antes de entrar para sacar mi pistola. Entré, estaba vacio, vacío como la otra habitación a la que había entrado, entré a la siguiente e hize lo mismo, la habitación era identica.
Me detuve, me recordó a un laberinto, entonces regresé y dejé las puertas abiertas por donde había llegado, no quería perderme si necesitaba escapar. Entonces entré hacia una habitación más, vacío. Pareciera que nadie había estado en este lugar en un largo tiempo. Esperaba ver 10 ninjas saliendo con espadas atacandome cien veces por segundo. Pero no había nada. Seguí buscando, todo esto era tan estúp... de repente, la escuché.
Parecía que luchaba contra algo, entonces corrí con todas mis fuerzas hacia ella, entré a la habitación donde había escuchado su voz, pero no estaba ahí.
-¡¿______?¡- grité su nombre. Seguí corriendo por las puertas como loco buscándola.
- ¡JASON!- gritó, la escuché detrás de mí. Dí la vuelta y corrí hacia donde la había escuchado.
- ¡Si... sigue! ¡Sigue hablando mi amor!- Le dije, seguí corriendo por más y más puertas.
- Es una trampa... ¡Sé que es una trampa!- gritó ella. Giré mi cabeza hacia atrás.
- Lo... lo sé.
Continué corriendo por las habitaciones, siempre regresando hacia la misma. Entonces lo supe. Moví y aparté los estantes de la pared. Ahí estaba, una puerta. La abrí de golpe y la cubrí con los estantes de nuevo. Ahí estaba ______.
-¿Jason?- dijo ella.
Con todas mis fuerzas moví todo con un empujón y entré hacia la habitación, la encontré sentada, recargada contra la pared. Mi corazón comenzó a latir fuerte cuando me encontré con su mirada; cansada, dolida y lastimada.
Corrí hacia ella y caí de rodillas mientras la abrazaba. Mi cara se hundió en su cabello mientras la apretaba más hacia mí.
- Oh... por fin... ______...
- Sabía que llegarías.- decía ella.
- Siempre.- Entonces la ayudé a levantar hasta que estuvo de pie. - No, no estas bien...
Entonces la cargué en mis brazos, ignorando mi cansancio, y me dirigí de nuevo hacia donde había comenzado cuando entré. Pasamos por la puerta y me quedé inmovil, las puertas se habían cerrado. Mierda, una trampa. Entonces, de la nada, me llegó el olor a... humo.