Hacia la guerra: Interludio
Emiya parpadeó "¿Un sueño ...?"
Se llevó una mano a la cabeza, tratando de recordar las imágenes finales que había visto.
Importante. Había habido algo importante al respecto.
Una voz familiar, una sensación familiar ...
Pero no lo recordaba.
Fue suficiente para llevarlo incluso a él, que normalmente mantenía una conducta férrea, al desorden mientras luchaba mentalmente para retener los fragmentos que se desvanecían rápidamente de esa escena transitoria.
Al final, lo único que pudo recordar fue ...
Una mujer de cabello largo y negro y ojos azul claro. De pie a su lado mucho después de que los demás hubieran pasado ...
Emiya dejó escapar un suspiro y echó la cabeza hacia atrás.
No había nada más que pudiera hacer con el sueño.
Los sueños ya eran lejanos y pocos para alguien como él, ya que rara vez necesitaba dormir.
Pero lo poco que recordaba hizo que apareciera un ceño fruncido en su rostro.
"Tu origen no es solo ... ¿Qué, Rin? ¿Qué me dijiste? ¿Qué olvidé?"
Sus palabras fueron murmuradas en la oscuridad, una pregunta sin respuesta.
Por supuesto.
Después de todo, la persona a la que se dirigió había desaparecido de su vida.
Emiya negó con la cabeza y miró a su alrededor.
El escenario le resultaba familiar.
Estaba en una habitación pequeña, similar a un apartamento tipo estudio, y se había colocado junto a una pared, como siempre hacía.
Una ventana en la esquina permitía que los rayos de la luna iluminaran la habitación, proyectando todo con su luz etérea.
Al hacerlo, reveló una cama al lado de la ventana, con alguien todavía profundamente dormido debajo de las sábanas.
El escenario le resultaba familiar. Demasiado familiar.
Tan familiar que, por un momento, Emiya vio un lugar diferente, un tiempo diferente.
Una mujer con largo cabello negro y ojos azul claro sentada en un escritorio escribiendo fórmulas complicadas a la luz de las velas.
Él la obligó a descansar un poco sabiendo que nunca lo haría sin él.
Ella lo obligó a descansar también y se negó a dormir hasta que al menos se sentó en un asiento cercano y se relajó.
-Pero este no era ese lugar, y no era ese momento.
Todo le resultaba familiar y, sin embargo, todo era diferente.
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Espada de origen: Protector de Zero
FanfictionLos había protegido, salvado. Una espada que corta sin piedad a todos los que se atreven a hacerles daño. Pero pasó el tiempo, al igual que a aquellos a quienes debía proteger. Pensó que finalmente había llegado su momento, pero parecía que Fate ten...
