CAPÍTULO 2

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¡Plin! “Planta 150” –avisó la voz mecánica-

-Bulma disculpa, fui descortés contigo. –dijo mientras posaba una mano en el hombro de esta-

Las puertas se abrieron.

-Olvídalo. –Se giró sonriente- Vamos, por aquí. –Indicó con frenesí-

Goku quedo sorprendido por su tan rápido perdón.

La planta 150 no era nada fuera de lugar, era de decoración sombría y apagada, extraño, estando tan alto debería ser un lugar luminoso. Había como 15 box –oficinas, todos eran numerados con el correspondiente número-, todas eran cubiertas por las típicas persianas metálicas, eso dificultaba la visión en el interior. 

-…10…6…3… ¿¡Ves el box uno!? –Indico ella con un dedo hacia el fondo- Esa es la oficina del Boss.

Ohh… ya veo. –se rascó la cabeza´- Oye Bulma… ¿Por qué aquí no hay nadie?

-Somos todos muy silenciosos –río- Nunca sabes lo que aquí puede ocurrir.

Esa respuesta no dejo satisfecho a nuestro Goku, aún tenía una duda…

“Clok, clok” –golpeo la puerta Bulma con la mano- … ¿Señor Broly?

La puerta se abrió sola, parecía la típica escena de película de horror.

Desde afuera Goku pudo observar un ambiente obscuro en el interior del Box.

Bulma fue la primera ene entrar.

-Vamos! Goku! Entra! –Incitó desde el interior-

Aun teniendo la duda en el cuerpo se precipitó a entrar.

¡SORPRESA!

Él se asustó, la luz se encendió.

Allá dentro se encontraban reunidos alrededor de 30 empleados a la vez.

Un chico de baja estatura fue el primero en acercarse a Goku. Le llamo –a Goku- la atención por el simple hecho de tener el pelo en forma de llama, además, ese traje de ejecutivo lo hacía irresistible.

-Hola, soy Vegeta. –Le guiño un ojo- Encantado de conocerte. –sonrió-

-…Em… Em –Balbuceó- El placer es mío. –Sonrió Goku-

Después de esa pequeña charla Vegeta se alejó, ahora en entrar en el campo de conversación fue otro.

-Hola! Empleado. –Goku se giró sorprendido- Yo soy Broly, el Boss.

-Oh! Todo un placer, jefe. –Se estrecharon las manos- 

-Quería comentarte que esta noche hacemos una cena de empresa y ya que eres nuevo allá te haríamos un pequeño recibimiento al equipo de trabajo… Y bien ¿Estas libre?

-Sí, claro. Como usted desee. –Sonrió-

-¡Bien! –le devolvió la sonrisa- Veo que eres muy empático, me caes bien.

Broly se marchó dejándolo solo.

-Vaya, vaya… Mira quien está aquí. –dijo una voz con tono sarcástico- 

-No será… -pensó Goku al escucharlo-

-Hola, primito. –una mano morena se puso en su hombro-

-Turles, faltabas tú… -se quejó Goku de forma disimulada-

Turles era un chico igual a Goku, únicamente, este era mucho más galán y cautivador que su primo Goku. Le encantaba vestir de negro, de hecho ese color le favorecía bastante. En la empresa corría el rumor de que se acostaba con una de las secretarias, todos piensan en Bulma. ¿Quién sabe?

-Ay! Primito porque –lo rodeó con los brazos- siempre eres así conmigo. –Sus labios quedaron enfrente a los de su primo- Sabes que yo te quiero mucho, ¿Verdad?

-Aparta –lo empujó- No intentes seducirme, primo. –gritó enojado-

Jajaja, ¿Yo? –río- No soy Gay.

La gente del alrededor se sorprendió, incluso, Bulma.  

-Hey, hey, hey para el carro, nuevo. Deja en paz a mi querido Turles. –se interpuso agarrando el cuello de la camisa de Goku una chica de pelo índico-

-Lunch! Déjalo, es solo mi querido primo… -dijo Turles mientras agarraba a Lunch por el brazo- Luego ya hablaremos, eh –guiño un ojo-

Lunch se sonrojó y se fue, sonrojada, quien sabe dónde. 

CONTINUARÁ…

Dragon Ball Z: La Empresa Macabra *YAOI*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora