GRACE © [COMPLETA✓]

CAPÍTULO 20: RECUERDOS DE UN AMOR

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Todos en la vida tenemos un primer amor, no siempre es quien se te declare de primero o quizás tampoco sea el que tus ojos vean más llamativo, a veces es esa persona que nunca pretendías conocer, pero por obras del destino aparece por arte de ¿Magia? ¿Casualidad? ¿Coincidencia? En fin, ese primer amor llega a revolucionar tu vida, causando maremotos de emociones y sentimientos.          

Grace

A partir de los 16 años ya a mi alrededor estaban todas las de mi edad preparándose para encontrar el tan aclamado esposo que diera una buena dote por ellas a su familia, fue desagradable presenciar como hombres tan mayores que podían ser incluso hasta mis abuelos se pavoneaban al elegir por esposa una niña y sus padres las cedían ante ellos como ovejas llevadas al matadero. 

Fui bienaventurada al haber sido criada por el Sr. Osiris. Fiestas, bailes, tardes de té eran parte de lo que se veía y de mi parte siempre fueron divertidos hasta que conocí al Sr. Brandon Jaar Anderson, un apuesto joven caballero que con sólo una mirada de sus oscuros ojos podía hipnotizarte y te hacía suspirar al admirar cada uno de los gestos que supongo yo que eran de manera inconsciente, nos hicimos cercanos aún más de lo que llegué a imaginar, su cercanía era provocadora, todo él te invitaba a tirarte en el fuego y sentir el calor de las brasas cuando ya estuvieras dentro ardiendo, su envolvente voz que al escucharla se volvía como música para mis oídos, su manera de compasearse entre los demás lo hacía ver lo que realmente era, una persona de altura, su caminar tan varonil, su tono de piel tan hermosamente codiciable y no he de decir lo contrario, y con tanto que he dicho me enamoré profundamente de él.

Cualquier mujer tenía rotundamente prohibido declarar su amor a cualquier hombre sin que éste se le haya declarado antes, y las que tales hacían eran consideradas como una deshonra y vergüenza para su familia y para todas las demás mujeres. 

Por un tiempo callé con tal de analizar bien los sentimientos que estaba valga la redundancia sintiendo, no quería confundir una pasión fugaz con un posible amor, pero siendo aún tan joven reuní todas aquellas cualidades que me identifican y las usé a mi favor, nunca nadie supo de esto salvo él y yo, de mi parte no me importaba lo que en Umbrella se pudiera comentar acerca de mi persona, en yo estando convencida de lo que soy me sentía en paz.        

Él era el hombre ideal, aún con sus defectos era perfecto, su carisma endulzaba mi paladar, su risueña risa ¡Ash! todo él te enloquecía y a la vez te confundía, él fue mi primer amor, el que aún hace vibrar mi corazón.      

Su forma de comportarse tan respetuosa era sorprendente, y ¿Ya hablé sobre su piel? Era como un perfecto chocolate, su tez morena, sus perfectos ojos oscuros, su espléndido cabello rizado, él era único.                                    
          
Aún recuerdo como si hubiera sido ayer nuestra primera conversación.