Midnight Awake

3. DECISIONES (Parte Final)

En la mañana temprano Chanyeol se despertó y estaba solo en la cama, igual que todas sus madrugadas, comenzaba a odiar la sensación de que el lado de la cama de Baekhyun estuviera frío, pero esa mañana, a diferencia de las otras, su lugar aún seguía tibio.

Sonrió y se puso sus gafas, removió su cabello y comenzó a buscar sus pantuflas, sólo logró encontrar una y cuando buscó debajo de la cama, encontró una zapatilla blanca la tomó y al verla mejor se percató que estaba salpicada de sangre, al instante la arrojó al suelo. Comenzó a sentir escalofríos recorrer toda su espina dorsal, frotó sus brazos como si en la habitación se sintiera una ventisca fría, cuando se giró la ventana estaba abierta, se levantó del suelo a cerrarla con temor.

-¿Me extrañaste?- se detuvo y luego se giró de inmediato al escuchar esa voz. Baekhyun estaba ahí de pie justo detrás de él, su cuerpo estaba desnudo y rebosante.

-El clima está frío, vas a enfermar amor, aunque me encanta ver este lado tuyo más atrevido.- le sonrió y besó sus labios. Miró hacia el suelo y el zapato ajeno que encontró ya no estaba, miró extrañado pero el demonio lo distrajo llevándolo a la cama para subirse en su regazo.

-Hoy yo te hice el desayuno. ¿Quieres que lo traiga?- sonrió malicioso.

-Este tocino está delicioso, ¿dónde lo conseguiste? Y los pancakes son un extra, todo está muy rico. ¿Desde cuándo regresaron tus habilidades culinarias? Solías preparar el mejor estofado de tofu del mundo. Parece que por fin todo está volviendo a la normalidad.- el alto no dejaba de sonreír mientras comía las tiras de tocino fresco.

Baek sonrió pues solo tenía que indagar en la memoria de ese chico para saber cómo hacer lo que le gustaba a Chanyeol, además que la carne humana era deliciosa, sabía que a su científico le gustaría pero no podía decirle que se estaba desayunando a la enfermera.

-Un chef jamás revela sus secretos, o como sea. Quiero experimentar más de estas cosas de las que este chico tiene habilidades con sus manos.- dijo mirándose ambas manos.

-Cariño, sé que no te sientes tú por todo el proceso de suspensión y regeneración celular de tu cerebro, pero deja de hablar en tercera persona, es un poco extraño, pero descuida, seguiré teniendo mucha paciencia hasta que todo vuelva a estar normal, hasta que te acostumbres de nuevo a ser tú.- Baek le miró sin poder entender la mente del alto, en algún punto el no podría ser Baekhyun y ahí tendría que tomar una decisión, aunque le comenzaba a agarrar una especie de cariño, si así podría llamarse, no podría estar con él, un demonio y un humano era demasiado insano.

Le acarició el rostro cuidando de no sacar sus garras de forma inconsciente y rasgar su rostro por la mitad. Para Chanyeol era una muestra de cariño, pero no sabía que en el fondo el demonio estaba meditando todo, el humano no lo querría nunca como realmente es, es solo veía al humano muerto en él, Baekhyun. Se levantó de la cama para ponerse pantalones y salió de ahí sonriendo con una excusa barata de ir a la cocina por agua.

Al cerrar la habitación a sus espaldas sintió algo extraño en su pecho, dolor. El era un demonio, jamás podría tener sentimientos como los de los humanos, ¿pero entonces por qué dolía? Era extraño.

Sentía que se asfixiaba de nuevo, ahí estaba esa sensación que le recordaba su verdadera naturaleza, tenía hambre pues no había comido esa noche por intentar hacer esa comida extraña buscando aceptación del científico, su rostro se ensombreció, sus ojos se volvieron grisáceos casi obscuros y sin vida, él no tenía que buscar más la aceptación de ningún inferior humano, salió por la puerta trasera de la cocina caminando descalzo y con el pecho semidescubierto por la fina pijama de algodón.

Comenzó a llover de pronto y Jongdae tuvo que activar sus limpiaparabrisas para poder ver el camino hacia la casa del doctor Park. Le faltaban un par de kilómetros cuando entré el pastizal vió una figura humana caminar con mucha determinación.