¿por qué no ves que te amo? (Chile x México)

parte 6 capítulo 1

Puse una mano sobre su hombro, él tomo un poco de aire y dejó caer más lágrimas mojando un poco sus pantalones

- es que yo... No puedo seguir con Alemania
- por que? -pregunté luego de unos segundos
- es que...seguir con él no tiene sentido... la relación era forzada por mi padre y mi madre cree que estaba con él por que lo amaba, pero no...dormir junto a él era una tortura, por eso le suplique a mi madre que me enviara hasta aquí...lo que no sabía es que él también vivía aquí...hoy me atreví a terminar con él, no lloro por que terminamos...lloro por miedo a lo que diga y haga mi padre - se secó las lagrimas, escuche atentamente cada una de sus palabras mezclada con el llanto, me senté en la orilla de la cama junto a él, Chile me miro y yo lo abraze con fuerza, al principio no reaccionó, pero después me abrazo con más fuerza soltando todas las lagrimas que quiso, mojó mi polera con cada una de sus lágrimas, de pronto dejo de llorar y su abrazo se soltó un poco, lo mire y note que se había quedado dormido de sólo estar llorando, ¿qué tan malo sería él Sr. Mundo, que tanto miedo le tenía?, lo acosté con cuidado y lo bese en la frente, él abrió un poco sus ojos, lo había despertado

- buenas noches mi chilito - le dije casi sin darme cuenta
- no te vayas Mex, no quiero dormir sólo - dijo sujetando una de mis manos con fuerza
- sólo estamos separados por 2 metros Chile - le dije
- lo sé...pero quédate a dormir aquí - el tono de su voz era tan tierno que no pude resistirme, caí en su cama como una gota de rocio cae al suelo, cuando estuve acostado junto a él, él me abrazo, estaba algo tenso, pero cuando sentí su cálido brazo rodearme me relaje como nunca, lo volví a besar en la frente para que se calmara y lo abraze con delicadeza, él sonrió y bostezo, se quedó dormido unos segundos después, yo me dormí después.
Cuando desperté, Chile aún dormía, deje de abrazarlo y me levanté para ir al baño, salí después de un rato, comenze a cambiarme de ropa frente a Chile,  él seguía dormido así que no me preocupé, le di la espalda un rato

- Hola Mex...despertaste temprano
- eh...si, te parece si bajamos a comer? - le pregunté terminando de ponerme la polera
- no quiero salir - dijo, lo mire y noté que el característico brillo que siempre tenía en los ojos, había desaparecido
- entiendo, te traigo comida?
- por favor - me respondió

Bajé a la cafetería, me encontré con Pakistán

- Mexi alfin te encuentro - dijo Pakistán sonriendo
- Hola - le respondí
- acabas de llegar!! - le gritó alguien de lejos
- cállate Uzbekistán!! - le gritó Pak y luego suspiro- te venía a entregar esto- dijo pasandome la hoja que yo le había entregado antes
- pudiste sacar las huellas? - le pregunté
- si...la mitad de las huellas- dijo viendo una pequeña libreta- eran tuyas, otras eran de España y el resto eran de Chile, son bastante huellas para una hoja tan pequeña, luego está el portafolios, tiene las mismas huellas que la hoja, pero en menor cantidad, revisando el portafolios encontré este lapicero de tinta negra, la misma tinta de la hoja, las huellas son de la Sra. Luna y de Chile, lo que me hace pensar que el autor de esta hoja...
- es Chile? - pregunté interrumpiendolo
- exactamente
- gracias por tu ayuda Pakistán...voy a salir de dudas ahora - le dije, tome una buena ración de comida y volví a la habitación. Abrí la puerta de la habitación despacio y entre con la comida, Chile seguía sentado en la cama abrazando sus piernas, sollozaba un poco, su celular a su lado no dejaba de sonar, alguien lo llamaba y mientras más sonaba el celular, más lloraba Chile

- Chi... que pasa? Por que no contestas? - le pregunté dejando las cosas sobre la cama y sentandome en la orilla de su cama
- no_ no quiero contestar - dijo secándose las lágrimas con una mano y con la otra tomo un jugo que yo le estaba ofreciendo, se llevó el jugo a la boca y bebió un poco - gracias por el jugo Mex...el de manzana es mi favorito
- es tu padre verdad? - le pregunté mientras le preparaba un sándwich 
- si...oye yo puedo hacerlo, no te molestes
- no es problema we, yo lo hago
- esta bien, gracias - me respondió y siguió tomando de su jugo
- quizás aún no sabe...deberías contestar - le dije pasandole el sándwich
- claro que ya lo sabe, Alemania le cuenta cada detalle de lo que pasa
- también le cuenta cuando ustedes...bueno, ya sabes, hacían eso - dije sin saber explicarme bien
- que?...ah, no...nunca lo hicimos
- ah bueno... - dije, sentí un gran alivio por dentro al escuchar su respuesta
- bueno...le contestaré, pongo altavoz?
- si quieres - le respondí

Chile tomo su celular y tras tomar valor contesto,puso altavoz y suspiro

- Hola? - preguntó a la espera de alguna respuesta
- al fin contestas niño...
- tengo 211 papá...
- lo sé, sólo es un decir, ahora dime, por que?
- por que que?
- por que terminaste con Alemania?!
- no entiendes que no lo amo?
- que importa si no lo amas? Pague mucho para que estuvieran juntos,  y me sales con esto? - Chile sólo se quedó callado ante la actitud furiosa de su padre - ni siquiera tuvieron relaciones!
- acaso me vendiste para que sólo se aproveche de mi? - pregunto Chile al borde del llanto otravez
- no digas que te vendí
- es exactamente lo que hiciste!
- hijo cállate y escuchame!
- por que debería callarme cuando lo que digo es verdad? En realidad, nisiquera soy tu hijo, no tengo por que obedecer tus estúpidas reglas, 211 años... 211 años de pura soledad! Me adoptaron nada más para dejarme con una sirvienta hasta que tuve la edad apropiada para quedarme sólo, no sé cómo aún después de todo los seguía queriendo, pero te aguanto hasta aquí no más, tu ya no eres mi padre! - le gritó, colgó lo llamada, lágrimas corrían nuevamente por sus mejillas
- Chile? - dije aún sin poder procesar todo lo que había pasado
- que acabo de hacer? - dijo dejando de llorar- me siento...me siento tan bien después de haberle gritado toda la verdad
- liberaste todo el peso que tenías encima - le respondí con tranquilidad
- nunca me había sentido así - dijo, le dio una mordida a su sándwich, yo también comí mientras lo miraba en silencio, él brillo había vuelto a sus ojos