¿por qué no ves que te amo? (Chile x México)

parte 2 capítulo 1

*narra México*

Me desperté en medio de la noche, me senté en la cama frotando mis ojos, sudor corría lentamente por mi cara, al parecer había tenido una pesadilla pero no lo recordaba claramente, Chile dormía cómodamente tapado hasta el cuello, hundía su cara en las almohadas, se veía demasiado tierno, lo mire por bastante rato, estaba hipnotizado con tanta belleza ¿en serio estaba tan enamorado? Apenas lo conozco pero siento como si lo conociera desde antes, me sentí un poco mal porque me enamoré del físico de Chile, no sabía siquiera su edad y estaba babeando por él, dejé caer mi cuerpo a la cama otravez, cerré los ojos tras un bostezo, me prometí a mi mismo conocer mejor al chico al que de seguro le dedicaría las pajas, bueno...eso sonó algo mal...demasiado mal en realidad, acabo de darme cuenta de que soy bastante pervertido, el punto es que quiero conocer bien a ese chico, ¿quién sabe? Quizás sólo la portada sea linda.

7: 45 A.M

Volvi a despertar, Chile estaba sentado en su cama frotándose los ojos, me senté en la cama e hice lo mismo

- ¡ey, buenos días Mex! - me saludó bastante feliz, su sonrisa estaba hecha por los Ángeles
- buenos días Chi, ¿dormiste bien? - le pregunté levantándome
- eh...si - me respondió para luego bostezar
- creo que aún tienes sueño - le dije riendo despacio
- no no, sólo bosteze
- oye...Chi
- dime -me respondió mirándome
- es que, anoche estaba pensando y llegue a una conclusión, apenas te conozco y me gustaría conocerte mejor
- claro po, no hay problema, aunque no tengo mucho que contar
- da lo mismo, yo también te contaré de mi, ¿te parece?- le pregunté
- si, está bien, empezemos por lo más simple, la edad, yo tengo 211 años
- ¡Yo también, tengo la misma edad!
- ¿De verdad? Te ves más joven - me dijo sonriendo
- tú también te ves mas joven - le sonreí, con sólo mirarlo me sonrojaba, seguimos preguntándonos cosas por bastante rato.

- siento como si te conociera de toda la vida - me dijo Chile, después de estar haciéndonos varias preguntas, él se ponía una camiseta
- siento lo mismo - dije junto a un suspiro
- ahora que lo pienso, tenemos mucho en común, cosas malas...pero al menos nos unimos por algo...ay estoy hablando puras weas, mejor ya bajemos a comer ¿no? - me dijo riendo, se abrochó el cordón del zapato y se paró de la cama
- si...vamos - le respondí mirando lo guapo que se veía

Mientras caminábamos por los largos pasillos, respondí a todas las preguntas que Chile me hizo sobre el edificio

- la última vez que vine a este edificio, fue cuando lo estaban construyendo y en realidad esto iba a ser un motel
- ¿qué?¿Un motel? - le pregunté entre risas sin creer lo que decía
- lo recuerdo perfectamente - me siguió contando entre risas igualmente- el primer piso tendría un bar y los otros tres pisos serían el motel, pero mi padre canceló el proyecto cuando el edificio estaba terminado, estuvo vacío por unos años hasta que a mi madre se le ocurrió transformarlo en lo que es ahora
- gracias a tu madre este lugar ahora nos sirve de hogar
- si po - respondió riendo otravez
- eh we...¿Por que no usamos el ascensor? ¿Para algo está no?
- esta bien, yo te sigo - me respondió con una sonrisa, caminamos hasta el ascensor y bajamos al primer piso en donde está la cafetería, pronto ya estábamos comiendo

- y como te decía, este pica pero poquito, casi nada - le dije mostrandole los diferentes tipos de salsa que había en la cafetería
- por si acaso igual no más tendré la leche a mano - me respondió mirando con desconfianza lo que yo le daba
- te aseguro que no pica ni un poco
- esta bien- probó otra de las tantas salsas que le di a probar, pero esta vez, su cara cambió
- ¿que pasa? - le pregunté
- ¡¡este si pica!! - me respondió, se llevó el cartón de leche a la boca y  casi se atraganta mientras se la tomaba
- ay...No vuelvo a probar ninguna más - la leche corría por su mentón lentamente, sin pensarlo tomé una servilleta y limpié la leche de su boca y mentón, cuando me di cuenta de lo que hacía miré a Chile, él estaba sonrojado y nervioso, yo me sonrojé mucho cuando lo vi así, por suerte nadie más en la cafetería notó lo que pasaba

- gracias Mex - me dijo agachando la cabeza, yo tiré la servilleta
- no es nada - le respondí con una sonrisa nerviosa, giré mi cabeza para no verlo, necesitaba calmarme, él también giró su cabeza al lado contrario, suspiré para relajarme, volví a mirarlo, me sobresalté cuando lo vi viendome

- ¿Chile? - dijo una voz que no reconocí, estaba en un trance viendo a Chile, volví a la realidad cuando él dejó de mirarme
- no puede ser... - dijo Chile con una leve sonrisa - ¿Rusky?
- ¿hace cuánto que no te veo? - le preguntó Rusia
- ¡la última vez fue hace 11 años!
- como pasa el tiempo - ambos reían, me di cuenta de que yo sobraba allí, además estaba incómodo de ver a mi ex, al parecer era invisible para Rusia, lo cual era bueno, hablaron por algún tiempo, luego Rusia se fué, agarré una botella de agua de la barra, en sólo unos minutos más de 10 countrys habían saludado a Chile, me atragante con el agua cuando Chile quiso agarrar mi brazo y agarró mi mano

- ¡Mex!¿estás bien? Perdóname
- estoy bien - le dije aún tosiendo un poco
- no quise agarrar tu mano, es que no te estaba viendo y pensé que era tu brazo, perdóname - me dijo, se veía preocupado, tomé más agua y se me pasó la tos
- te dije que estoy bien - le dije sonriendo mientras tomaba su mano, dejé la botella en la mesa sin soltar su mano
- ¿Mex?- pregunto
- tengo ganas de hacer algo - le dije algo sonrojado - ¿puedo?
- claro, ¿que cosa? - me preguntó extrañado, no le respondí, me acerqué más a él, sin soltar su mano, lo besé, fue un beso simple, en la mejilla, solté su mano y lo abracé, nuestras caras seguían juntas, resistí la tentación de plantar mis labios en los suyos, pasaron unos segundos, Chile se alzó de puntillas y me beso en la mejilla también, me sonrojé mucho, él me sonreía levemente, dejé de abrazarlo

- ¿Por qué hicimos eso? - me preguntó riendo un poco
- ni idea - le respondí - pero me encantó demasiado - susurré
- a mi también me gustó, aunque no se por que - me dijo Chi susurrando también mientras sonreía.