Capítulo tres

30 3 0
                                    


14 de enero de 1943

Habían pasado solo dos meses desde la derrota de Alemania contra los ingleses en la última batalla de Alameín, Egipto. Y como era costumbre, después de nuestra larga estancia de vuelta a Londres, un pequeño pelotón nos dirigimos hacia Marruecos, para la conferencia de Casablanca entre los principales líderes del bando aliado.

Acomodando mi corbata, mire el reloj en mi muñeca observando como las manecillas del reloj daban las 08:00 p.m. indicándome que debía irme.

Soltando un fuerte y pesado suspiro, me detuve en la puerta, al darme cuenta que no había terminado de arreglarme.

<<Concéntrate.>>

Me regañe, mientras me daba un pequeño sopeton en la frente por mi distracción.

Así que dirigiendo mis pies devuelta al armario que se encontraba dentro de aquella habitación, tome un abrigo para la ocasión, dejándome embriagar por el delicioso y discreto olor de una loción que me era familiar.

<<Elegante, como él.>>

Pensé. Entonces un pequeño gesto de diversión se formo en mi rostro, al recordar el alboroto de nuestro grupo de amigos, mientras Taehyung los callaba, cansado y aburrido, después de planear "el gran festejo" en honor a nuestro primer descanso, después de 3 años de servicio, en un famoso cabaret de la ciudad.

Así que una vez listo y cuidando no me faltará nada, baje las escaleras con rapidez, escuchando como el sonido de un claxon sonaba a las afueras de aquella pequeña casa, como señal que se encontraban esperando.

—¡Voy! —grite desde el salón principal, al escuchar de nuevo el continuo sonido de aquella ruidosa bocina.

<<Los voy a matar.>>

Pensé, mientras imaginaba como ahorcaba a mis amigos por su molesta insistencia.

—¡Dios, que ya voy! —me queje molesto saliendo del lugar, quedando sorprendido por lo que miraban mis ojos en ese momento.

<<Un hermoso Cadillac 40.>>

—¿Te gusta? —pregunto Taehyung con una sonrisa radiante, mientras asomaba su cabeza por la ventana—Me lo presto el comandante de fuerza aérea. —dijo refiriendose al coche.

—Wow... —susurre emocionado, echándole un vistazo al rededor.

—¿Genial, no crees? Solo tengo que dejarlo intacto, sin ninguna partícula de polvo sobre él. —bromeo, con su mirada fija en mí.

—Es precioso, Taehyung. —finalice, dejando salir un largo suspiro, comenzando a caminar hacia él.

—Anda, sube. —incito, dando un ligero movimiento de cabeza en dirección al coche. —Te encantará el interior, tiene asientos de cuero que no te dejan dolor de espalda. —finalizo.

Una pequeña risa salió de mis labios, apresurando mis pasos.

—¿Que encantos debió usar el increíble Taehyung para que el comandante le prestará su coche nuevo? —insinue divertido, con intenciones de adentrarme en el asiento del copiloto.

—No. —me detuvo el castaño, cerrando aquella puerta repentinamente, negandome entrar. —Tu manejas está belleza, hoy. —replico, saliendo del coche, comenzando a caminar hacia mi lugar.

—¿Que? —pregunte sorprendido.

—Corre, súbete o se hará tarde. —me ordenó, observando mi andar torpe para adentrarme al coche de mi sueños.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 11, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Louders than bomb // Yoontae-TaegiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora