-Acuarela-[Aizawa Shota x Oc]

20. Fuegos Artificiales

La chica miraba de reojo al pelinegro, era extraño todo aquello. El hombre la había sacado del trabajo bastante temprano, y ahora estaban en el tren rumbo a Saitama. No era que le molestará, en lo absoluto, pero pensaba que ese fin de semana también estarían apurados con los trabajos de sus pequeños alumnos.

-¿A dónde vamos?-se animo a preguntar.

Aizawa giro su cuello par poder ver mejor a la chica, lucia bastante linda, su cabello atorado en un chongo alto, con su típico flequillo. No lucia mucho maquillaje, solo un poco de sombra amarilla con naranja y un brillo labial, todo eso junto al vestido de estampado de girasoles le daba ese aire veraniego y deslumbrante. Aunque claro, con unas mayas amarillas con negro y una blusa de manga larga blanca.

-Hay un espectáculo de fuegos artificiales, quiero ir contigo.

Ren parpadeo un par de veces ¿Era tan importante ese ver eso?

-Lamento no avisarte con tiempo-continúo diciendo el azabache-, pero solo surgió.

La verdad era que no, Saori le había dado instrucciones específicas.

-No te preocupes, solo que fue inesperado...pensé que teníamos mucho trabajo, y no eres de los que les gusta dejar que el trabajo se amontone.

Aizawa mostro una leve sonrisa, llevo su mano derecha a la cabeza de la chica para acercarla y poder besar su frente.

-Es una sorpresa que quiero darte-dijo alejándose un poco.

Las mejillas de la pelimorada de tiñeron de rosa, esa faceta dulce y tierna del chico, era interesante. Se recargo por completo del respaldo del asiento, mirando por la ventanilla. Una leve sonrisa se dibujo en su rostro, algo que noto AIzawa bastante bien, y que lo hizo sentirse agradecido con aquella chica de cabello rojo.

-Por cierto-le llamo el chico otra vez, Ren lo miro de reojo-. ¿Quieres ir a cenar con unos amigos míos?

-¿Amigos? ¿Yamada y Nemuri?

-No, ellos no...son otros amigos, son Saori y Tsunagu.

-Ah, Saori-la forma tan gélida de pronunciar su nombre hizo que Aizawa frunciera el entrecejo.

-¿Tienes algo en contra de ella?-preguntó.

-¿Debería?-la chica sabía que era idiota de su parte pensar algo malo, pero debía obtener información. Más cuando había buscado el nombre de esa mujer, y el resultado arrojo a una chica hermosa de un largo cabello rojo carmesí, unos ojos que dejarían encantado a cualquiera por esa extraña heterocromía, además su piel parecía fina porcelana. Maldición, como odiaba que fuera tan guapa.

-¿Eh? ...no creo, no la conoces.

Ren no contesto, mientras que el chico contenía la risa. Los celos de la chica eran bastante notorios, y eso aunque pensara que no era correcto, lo hacía sentir bien.

-Ya veo-soltó la mano de la chica para cruzar los brazos.

-¿Ya ves qué?

-Algo sin importancia, es decir, puedo sentir los celos emanar de tu persona.

-¿Yo? ¿Celosa? JA.

-Como digas, pero contéstame ¿Quieres ir a la cena con Saori, y con su esposo?

Ren estaba por dar cualquier excusa para no ir, pero la palabra esposo la detuvo. Miro al azabache, este lo tenía una cara arrogante con una gran sonrisa, era claro que se estaba burlando de ella.

-¿Esposo?

-Por supuesto, puede incluso que lleven a su hijo.

-¿Hijo?-la incredulidad en su voz era notoria.