Sin Límites

Capitulo X

El radiante sol entra por mi ventana. Y Madi se encuentra a mi lado roncando como un cerdo.

Me cepillo los dientes y me alistó a mi cita con Brent.

¿En serio piensas que es una cita?

Capaz y si, cállate no arruines el momento.

Me coloco ropa cómoda, y bajo a desayunar un poco. Mi madre se encuentra en la cocina con André.

- Buenos días dormilona - Dice André con una sonrisa de oreja a oreja.

- Hola idiota - Le digo chocando puños.

Agarro una manzana de la nevera y le doy un mordisco.

El sonido de mi celular hace que se me caiga la manzana al suelo.

Llamada entrante ↓↓↓

Brent <3

-Aló - digo

- Te espero en el parque que está cerca de Ponks - Dice con voz de recién levantado.

Pero pero pero, con esa vozzzzz, mojas a cualquiera bebé.

-Vale está bien, nos vemos allá - Cuelgo.

#

Antes de ir al parque, me dirijo a Ponks a saludar a Nathan.

Entro al pequeño café y busco a Nathan y lo encuentro limpiando unas de las mesas.

-Hola llamitas - Lo abrazo fuertemente.

-Tú te vuelves a desaparecer así, y te juro; que te busco donde sea que te encuentres, y te desaparezco de la tierra yo. - Me fulmina con la mirada.

-Ya no lo haré, luego te cuento, ahora tengo que ir a verme con Brent - Le digo.

Nathan me mira extrañado. - ¿Con señor no me mires porque te arranco los intestinos? - Una risa burlesca sale de sus labios.

- ¿Qué? - Lo miro con gracia - Ah, si ese.

#

Termino de bromear con Nathan y me dirijo al parque, supongo que ya Brent me estará esperando ¿No es así?. Camino lo más rápido posible para no llegar tarde. Llego al punto específico dónde habíamos quedado Brent y yo en vernos. Al darme cuenta, él aún no ha llegado.

Me dirijo al puesto de un señor vendiendo Frappé y pido uno de piña. Le pago la cuenta al señor y me siento en una banca a esperarlo.

Rato después de estar esperando a Brent me propongo a caminar todo el parque para ver si no está en otro lado. Doy 3 vueltas y nada que aparece.

Decido llamarlo, no lo quise hacer antes para no verme tan intensa y necesitada.

Busco su número en mis contactos. Pero nada, cae la contestadora.

Ya me comienzo a desesperar y camino rendida para irme a mi casa.

-Idiota, ¿Para que me dices que venga para acá si me vas a dejar mal? - Digo entre mis dientes.

Salgo del parque, y una camioneta blindada ya conocida, se para al frente de mi. Pongo mis ojos en blanco y sigo mi camino.

Cruzo la calle y la camioneta arranca de golpe impidiendo mi paso.

-Maldito idiota - le digo al conductor.

Esté se baja y se posa al frente de mi. - Disculpa.

-¿Disculpa? Eso es todo lo que tienes que decir ¿Disculpa? - le hablo molesta - Tengo todo un maldito rato aquí esperándote y nada que aparecías. Hasta pensé que te había sucedido algo, y llegas aquí diciendo; Disculpa. Vete a la mierda Brent.