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POV omiso:

La puerta hizo un vago ruido al ser abierta por un hombre alto de cabellos oscuros, este se quitó sus zapatos y dejo su abrigo en los ganchos para ser recibido con un fuerte abrazo de su hija mayor.

P/K (padre Kyoutani): Hija, ¿Kentaro llego?

Saori: Si.

P/K: Debe estar en su cuarto, lo voy a despertar. —Dijo ya acostumbrado más fue detenido por su hija.

Saori: Esta en la sala, pero mejor no lo molestamos hasta que esté la cena.

P/K: ¿Por qué? ¿Ocurrió algo?

Saori: Eh..., no exactamente.

Anko: Trajo visitas. —Apareció, se acercó a su esposo y le dio un beso de bienvenida. — Que bueno que por fin llegaste, cariño.

P/K: ¿Visitas? Debe ser alguno de sus compañeros del club. —Dijo caminando con ambas mujeres por detrás.

Anko: De hecho, es una chica. —El padre se detuvo.

P/K: ¿Al fin consiguió novia? —Se dio vuelta a verlas con cara de sorpresa. En eso una pequeña risa interrumpió más un grito de su hijo.

Kyoutani: ¡PAPÁ! Y tu deja de reírte. —La fulmino con la mirada mientras esta paraba de reír. — No es mi novia, es una amiga. —Este estaba levemente sonrojado.

P/K: Ohhh, ya veo. —Dijo rascándose levemente la nuca. — En todo caso es un gusto conocerla, Kyoutani Daiki.

____: Igualmente, Himuro ____. —Ambos hicieron una pequeña reverencia como saludo.

Anko: Bueno, ustedes dos. —Señalo a los hombres. — A poner la mesa.

Daiki: Pero recién llego...—Respondió.

Anko: ¿Pregunte? No. A poner la mesa. —Ambos hombres se fueron resignados a hacer lo que se les ordeno mientras que Anko se encargó de sacar la comida y las chicas tan solo observaban.

Kentaro se veía tan tranquilo, muy diferente a cuando estaba con los demás.

Sin más la cena paso entre risas, anécdotas, preguntas de cómo se conocieron, etc. Todo muy animado y sin tenciones, algo que agradecieron todos.

Afuera la lluvia lo único que hizo fue empeorar y amenazaba con empezar a tronar, algo que a la peli negra no le gustaba.

Cuando era chica iba al cuarto de su hermano y dormía junto a él, y cuando él ya no estuvo más simplemente ponía música a todo lo que daba, claro que, con auriculares, pero ahora estaba en casa ajena y su celular sin batería.

Se despidieron de los demás para luego adentrarse a la habitación del rubio, al tener plena confianza en ambos les permitieron dormir en la misma habitación.

Dentro de esta había dos camas, una del lado izquierdo y otra del derecho siendo separadas por una mesa de luz y la ventada la cual estaba cerrada, pero con las cortinas abiertas dejando entrar la luz de afuera.

Kyoutani: Puedes usar la de la izquierda, ____-chan. —Sin más ambos se metieron a sus respectivas camas dándose la espalda inconscientemente, estaban nerviosos, había calefacción, pero sentían frio igualmente y de todas formas no estaban fríos sus cuerpos.

Ese sentimiento de vacío y felicidad a la vez, saber que sientes algo por el otro, pero no saber qué es eso que sientes.

Cuando estas esperando una acción para así entender lo que sucede.

Cuando te acostumbras a alguien, a su presencia, a su calor, pero con suerte son amigos.

Cuando sientes todo por esa persona, pero a la vez nada.

Momentos a solas (Kyōtani Kentarō y tu) [Haikyuu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora