¿El amor lo puede todo?

Introducción:

Olivia Benson, una mujer con una historia terriblemente triste, con una madre alcohólica y su padre..., su padre una persona que abusó sexualmente de Serena Benson la madre de Liv. Olivia entro a trabajar a Unidad de Victimas especiales, cuando era tan joven con la intención de ayudar a todas esas mujeres, a esos indefensos niños e incluso a los hombres que han sufrido algún acoso sexual por parte de otra persona. Liv una mujer especialmente hermosa, inteligente, fuerte y sobre todo valiente, podría asegurar que es el sinónimo de la palabra perfección. Probablemente se enamoró de su compañero de trabajo, de su amigo, quizás de su mejor amigo o tal vez el amor de su vida simplemente su alma gemela, se llevaban tan bien pero realmente tan bien que se podría asegurar que eran uno solo.

Elliot Stabler un hombre sumamente atractivo, detective de Unidad de Victimas especiales, con una historia triste, su padre un policía condecorado, no tan buen padre como todo niño quisiera, su madre una persona con problemas psicológicos. Elliot un hombre felizmente casado con cinco hermosos hijos, probablemente eran la familia perfecta, hasta que una joven hermosa entro a la vida de él, se metió en su vida sin ni siquiera pedir permiso, sin él tan siquiera darse cuenta.

Se conocían tiempo atrás, cuando empezaron a trabajar juntos en la unidad de Victimas especiales como pareja. La vida de cada uno de ellos no era nada fácil, ambos pasaban por complicaciones, por muchas complicaciones, pero, se tenía el uno al otro, cuando alguien estaba al borde de caer el otro le daba la mano para sostenerlo o quizás para caer juntos. Todo eso cambio, cuando el decidió irse sin despedirse. Ambos quedaron con el alma y el corazón desecho. Ella sufrió porque él se fue sin decir nada, hizo tantos intentos por comunicarse con él, pero todos fueron en vano, nunca respondió ni un solo mensaje, ni una sola llamada. Y él por su parte sufrió por irse, por dejarla, por abandonarla, por ser un cobarde, pero realmente tenía que irse, no podía ni si quiera ver a Liv a los ojos después de matar a una joven, la chica estaba disparando por todos lados, matando a muchos inocentes, él tuvo miedo que pasara lo peor, que aquella joven continuara disparando y por una mal puntería le disparara a Liv, a su Liv. Otra vez la había escogido a ella antes que a una víctima. Y no se arrepintió de hacerlo, lo volvería hacer si fuese necesario, pero sabía perfectamente que después de eso pasaría lo peor, tendría a sus superiores investigándolo, a él y a Olivia, siempre hubo sospechas de que ellos eran más que compañeros, más que amigos, aunque solo fueron los personas que se amaban tontamene en secreto. Realmente era necesario que se fuera, él necesitaba huir, si, huir. Huir de todo y de todos e incluso de él mismo, de sus sentimientos, de sus debilidades.