All Or Nothing|| 𝔇𝔯𝔞𝔠𝔬 𝔐𝔞𝔩𝔣𝔬𝔶(+18)

3. Malfoy

Malfoy

- ¿Estas loco? – lo aparte- ¿Sabes el susto que me has dado?

- ¿Cómo sabes que era yo?

- Por dios Malfoy llevo oliendo esa colonia desde que era niña.

- Mmmm me gusta que me reconozcas.

- Cállate y enciende la puñetera luz.

Lo escuche reír de fondo, ¿Dónde cojones estaba? Podía sentirlo respirar tranquilamente, estaba andando despacio dando pasos cortos y lentos. Aguanté la respiración cuando lo sentí tocarme la espalda, suavemente mientras sentía sus uñas apretarme la piel un poco, enseguida se me puso la carne de gallina y empecé a respirar entrecortadamente.

- ¿Esto te gusta?

Estaba justo detrás de mi, susurrándome en el oído, su aliento acariciando mi cuello haciendo que me estremeciera de placer.

- Ya te lo he dicho Malfoy, ni en tus sueños.

- Creo que tu cuerpo dice otra cosa.

Sonrió entre el hueco de mi cuello y mi hombro, empezó a darme pequeños besos y mordidas. Eso iba a dejarme una marca que otra, pero aun así me estaba gustando. Me agarro del pelo fuertemente tirando para atrás, estaba apoyada en su pecho, lo sentía respirar fuerte, podía sentir su bulto.

- ¿Qué es lo que quieres _______?

No podía hablar, sentía la garganta seca, empecé a tragar saliva para mojármela un poco. Con su dedo índice toco mi muslo, sentí una electricidad que fue directamente entre mis piernas, estaba mojada, demasiado mojada para lo poco que me había tocado.

Su dedo empezó a subir y di un pequeño saltito por la sorpresa, tenia la mente en otro lado, mi vista se estaba nublando y justo antes de tocarme se aparto. Haciendo que mi cuerpo lo llamara, lo necesitara. Me apoyé en la primera mesa que pude, sentía mi cuerpo temblar de la frustración.

- En tus sueños Ambrosius.

Abrió la puerta y desapareció, dejándome allí sola. Demasiado cachonda, tarde unos segundos en reponerme, y la frustración paso a la ira. Esto iba a devolvérselo.

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- Hola _____.

- Oh, Ginny.

Estaba mirándome tímidamente, después de lo que paso con Draco no lo volví a ver, Salí de la habitación y me fui a dormir. Al día siguiente me dirigí al Gran comedor cuando Ginny se puso en medio del camino.

- Solo quería darte las gracias por lo de ayer.

- Mm no te preocupes, solo fue porque odio a Malfoy.

- Si tu lo dices. -Me sonrió y evite su mirada.

- ¡Ginny! Aléjate de ella.

- Pero hermio...

- Pero nada.

Agarro a la pobre pelirroja y se la llevo a la mesa de Gryffindor, le sonreí para que no se preocupara y me senté al lado de Blaise en nuestra mesa.

- ¿Qué hacías con una Weasly?

- No te importa Zabini.

- Tan amistosa como siempre.

Estaba tan sumamente perdida en mis pensamientos que no me di cuenta cuando Malfoy se sentó junto a Pansy.

- ¿Oye, ayer paso algo entre vosotros?