Holaa, antes de leer, aclaro. Quería hacer esta historia sin T/N, ya saben, la típica chica que se "supone" que somos nosotras pero en realidad es más perfecta que Gigi Hadid, y como eso no pasa, pues quité a T/N.
So, la historia estará narrada por Nicolaih, un chico que ya iremos conociendo poco a poco.
POV: NICOLAIH
—Les contaré una historia, la historia de ella y yo, de la chica más inteligente y hermosa que mis ojos hayan visto. No todo siempre fue perfecto, recuerdo que nos odiabamos, pero su terquedad, su manera de mirarme hizo que nada importara— comencé.
Giré mi cabeza, estaban tocando a la puerta.
—¡No estoy! ¡morí!— grité.
Escuché el pesado suspiro de mi madre y sus pasos alejarse, me relájé y volví a encender la cámara.
—Bueno, no alarguemos tanto esta mierda. Aquí va:
*****
—¿Que escuchas?— quité el auricular de la oreja de mi compañera de asiento.
—Harry Styles imbécil.
—¿Por qué tan molesta?
—Convivo contigo, eso es suficiente. Y como si fuera poco, no hiciste tu parte del trabajo.
Carajo, lo había olvidado.
—Hablaré con la profesora, diré que es mi culpa y está hecho.
Ella me miró con incredulidad, y con razón. Jamás aceptaba la culpa, incluso yo mismo me había sorpendido.
******
En ese momento no lo entendí, pero ahora se que siempre estuve enamorado de ella. Incluso cuando nos tratábamos como basura.
**********
—¿Su trabajo?— preguntó la profesora.
Pasé saliva y me puse de pie:
—Es mi culpa, no hice mi parte. Pero no tiene que castigarla a ella, yo acepto toda la responsabilidad.
¿Es enserio? Que carajo estaba saliendo de mi boca, iba a reprobar y yo solo quería que a ella no le afectara nada.
—Bien, señor Nicolaih. Tiene un 5 por su sinceridad. Usted, señorita, tiene un 10.
Una sonrisa se ensanchó en el rostro de mi compañera
—¿Lo ves? No soy tan imbécil— me defendí.
—Es lo mínimo, Nicolaih. Pero, digamos que te agradezco.
Me había llamado por mi nombre, usualmente me decía "hey, basura" o cosas así, supongo que era un avance.
********
Recuerdo que luego de clases siempre íbamos juntos en el autobús. En la escuela nos odiabamos, o algo así. Pero en realidad era una amienemistad, siempre podíamos hablar el uno con el otro, creo que las bases de nuestro amor siempre estuvieron presentes.
*********
—¡Lucas! Ya vámonos— le grité a mi hermano.
El bajó corriendo y se calmó al llegar a la puerta:
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LUZ ROJA
Random[..... Y al final de todo, sigo siendo simples palabras que un día leíste. Estiré mi mano y tomaste mi brazo, dándome la oportunidad de amarte y contemplarte. Aunque no me recuerdes, estoy ahí. Aunque no me veas, estoy ahí y cuando creas que ya me h...