LUZ ROJA

04 [comenzó el verano]

—Esta es una de mis partes favoritas, muchos momentos que me gustaría jamás olvidar sucedieron. Por otro lado, recuerdo que, Susan, mi madre, casi me asesina cuando se enteró de que golpeé a ese chico. Pero ya no extendamos esto y continuemos:

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—Nombre y apellido de usted y de su familiar acargo— preguntó la señora más odiosa que había visto, no sabía su nombre, pero su apellido era Drik, desde hoy digo oficialmente, odio a la gente con apellido Drik.

—Mi nombre es Nicolaih Morgan. Y el de mi madre es Susan Lein de Morgan.

—¿De Morgan?

—Olvídelo, solo Susan Lein.

La mujer asintió y me inscribió, pero, ¿para qué? Pues mi madre había decidido enviarme a Lucas y a mi a un campamento, convenientemente, Jack y su hermana también habían venido con nosotros, así que supongo que entretención no va a faltar.

—Entre, su cabaña es la 5— me  informó con una voz sosa.

Entré y Lucas ya se había instalado, para mi suerte, me tocó compartir cabaña con Lucas, Jack, su hermana y un chico llamado George.

—Jack, ¿y tu hermana?— preguntó Lucas.

—Oh, ahí viene, se tardó en inscribirse.

George, soltó su maleta de manera escandalosa.

— ¿Habrá una chica con nosotros?..— preguntó de manera nerviosa.

Todos asentimos despreocupados, pero el parecía al borde de el ataque cardíaco.

—¿Como me veo? ¿Estoy despeinado? ¿Debo darle flores?— preguntó tan rápido que noté que se quedaba sin aire.

—Oye, cálmate Romeo. La chica es de Nick— dijo Lucas.

Lo miré incrédulo

—¿Que? ¡No! Ella no es de nadie— dije rápidamente.

—Entonces, si hago el intento de hablarle todo ¿bien?— George era una chico bastante atractivo, pero del tipo torpe, tímido, y un poco intenso.

—Si, todo bien— aseguré.

Ella entró en la cabaña sosteniendo sus maletas, nos regaló una sonrisa a todos y eligió su cama, la cama justo al lado de la mía...

—Parece un Ángel— susurró George en mi oído.

—Si..— dije sin pensar— O sea, no.

George me miró raro.

—Solo, olvídalo— pedí.

—Oigan chicos, Jack y yo iremos a por nuestra lista de tareas, ¡no mueran y no se pierdan!— gritó Lucas saliendo de la cabaña.

Ella  se acercó a nosotros y nos dió una especie de manual de instrucciones.

—Me lo dió la Señora Drik. Son las reglas— dijo.

George quedó quieto unos segundos y luego reaccionó.

—Hola, mi nombre es George— se presentó con una seguridad que me sorprendió.

—Yo soy Elizabeth, un gusto conocerte George— se dieron la mano como saludo.

—Bueno yo.. Quería saber si más tarde querías ir a recorrer el lugar— George volvió a su postura nerviosa, y la situación era algo así.

George y Elizabeth estaban frente a frente, mientras que yo, estaba en el medio como idiota viendo cómo la invitan a salir.

—¡No pueden!— me apresuré a decir. Carajo, ya lo arruiné— La señora Drik te estaba buscando George, quería presentarte a alguien.