EL GRAN EJÉRCITO

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       Dos días después , la hueste del Jarl Olaf se une al ejército danés que va a conquistar Wessex el último reino sajón , en la ciudad de Clouchester en el reino vecino de Mercia

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Dos días después , la hueste del Jarl Olaf se une al ejército danés que va a conquistar Wessex el último reino sajón , en la ciudad de Clouchester en el reino vecino de Mercia . La propia ciudad no podía albergar tantos guerreros , así que se montó un pequeño campamento a las afueras de la ciudad sajona .

- Eric , Haldran quiero que me acompañeis al interior . Voy a presentar mis respetos a los hijos de Ragnak - nos dice el Jarl Olaf .

A su lado , dos caballos , uno negro y otro marrón claro con sus sillas de montar colocadas .
El enorme Haldran , un guerrero danés , joven , con pocas luces pero gran fuerza física y tremendamente leal , es el berserker del clan Oso . Con su piel de oso puesta encima de su cabeza , puso nervioso al animal .

- Quitate la piel de oso . Su olor molesta al caballo - le dice Eric .

- ¿ Y cómo voy a ir a la batalla entonces ? - pregunta Haldran .

- Aún no vamos a la batalla . Vienes como mi escolta - le explica Olaf .

No muy contento , Haldran se quita la piel de oso . Aunque el olor lo sigue manteniendo , el berserker consigue subirse al caballo . Al cinto porta una espada de más de un metro , a la que ha llamado Cortacabezas .
Por su parte Eric acaricia al caballo para tranquilizarlo antes de montar .
Los dos guerreros daneses montan y siguen a su jarl hacia la entrada de la ciudad . Se cruzan con campesinos tanto sajones como daneses que van al día del mercado .

-¡ Parte de la empalizada es de piedra ! - exclama asombrado Haldran , cuando se acercan a una de las puertas amuralladas de la ciudad .

- Es una muralla . Construida por los romanos hace siglos . Pero los sajones no la han sabido mantener . Por ese motivo , en algunas partes han colocado postes de madera - le explica Eric que ya ha estado en esas tierras .

- Esos romanos ¿ son los mismos que hicieron el camino de piedras que nos ha traído hasta aquí ? - pregunta Haldran .

- Así es - responde Eric .

- ¿ Por qué hacían caminos de piedra ?

- Supongo que para no perderse por el camino . O para que sus carros o sus caballos no se atacasen en el barro cuando hubiera lluvias - se encoje de hombros Eric .

- Si en vez de construir Iglesias para su Cristo blanco con piedras, las usarán para mantener las murallas , sus ciudades serían más difíciles de tomar - dice Olaf .

- Como el alcázar de Sevilla .
Los muros de la fortaleza eran tan altos que tuvimos que sitiar la fortaleza , una vez saqueada la ciudad . Como siempre , nos pagaron para que nos fuéramos - cuenta Eric , acordándose de sus días de saqueo en Hispania .

Las murallas podían parecer impresionantes , pero las calles de la ciudad estaban cubiertas de barro y yerba pisoteada por las lluvias caídas . Al llegar a las calles del centro de la ciudad , donde asoma la torre de la iglesia , el suelo está pavimentado con piedras más o menos rectangulares . Los tres hombres llevan los caballos al paso , y al mismo tiempo ven a grupos de guerreros daneses apoyados en los muros de las casas , o charlando entre ellos en torno a las mesas de alguna posada .
Hasta que llegan al centro . Allí cerca , la iglesia cerrada , y varios edificios de piedra en torno a la plaza . En torno a uno de los edificios con grandes columnas y con la fachada con relieves , se ve un gran número de caballos y de guardias armados hasta los dientes .

VIEJO VIKINGO -  escrito por Jesús Quintela Navazo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora