La princesa olvidada

La princesa olvidada - Capítulo 6 El caballero de la princesa

Han pasado unos días después del gran baile. Mi vida normal volvió a ser como era, con la excepción de William.

Estos últimos días William siempre me ha estado visitando aquí en mi patio. Hemos estado hablando de muchas cosas como política, historia y otras cosas.

Era de mañana y acababa de terminar mi ejercicio matutino. Desde que era joven, el abuelo Robert nos capacitará a Richard ya mí para fortalecer nuestros cuerpos.

"¡Hermana Alicia!" Escucho la voz de mi hermano menor Richard. Cuando miro detrás de mí, lo veo corriendo hacia mí.

"¡Hermana!" Richard se lanzó hacia mí.

"¡Whoa!" Me sorprendí y abrí los brazos para atraparlo. Pesaba mucho más que yo ahora que estaba a punto de perder el equilibrio. Afortunadamente logré equilibrarnos a los dos.

Hermana, no me ha visitado en mi patio. Richard estaba llorando. "Te he extrañado mucho."

"Silencio ahora. Un príncipe heredero no debe mostrar sus lágrimas a los demás". Dije mientras se secaba las lágrimas.

"Pero tú no eres 'otros' Alicia. Eres mi hermana." Richard me miró con sus ojos de cachorro.

"Oh, te ves tan lindo y adorable cuando haces eso. Eso no es justo". Dije mientras pellizcaba sus mejillas. "Acabo de terminar mi ejercicio matutino. Iré a tu patio después de lavarme, ¿de acuerdo?"

"¿Promesa?" Richard me miró con su lindo rostro.

"Lo prometo." Dije. "Ahora continúa."

"Está bien. Te esperaré." Dijo y corrió hacia su patio.

Richard tiene ahora doce años. Ahora se estaba acercando a mi altura. Estoy seguro de que me superará en poco tiempo. Está comenzando a perder sus mejillas regordetas y su cuerpo comienza a volverse el de un joven. Voy a extrañar al pequeño munchkin que siempre estuvo a mi lado queriendo jugar conmigo.

***

Camino hacia el patio de Richard. Me he lavado y refrescado. Llevaba uno de mis vestidos casuales, por supuesto, uno de mis hermanas me regaló.

"Alicia." Alguien me llamó. Cuando me di la vuelta, vi a William caminando hacia mí.

"Será." Le sonreí.

"Una de tus sirvientas me dijo que estabas aquí". Williams dijo y sonrió.

"Voy a visitar a mi hermano hoy. ¿Te gustaría ir conmigo?" Yo pregunté.

"¿Puedo acompañarte?" Preguntó William.

"Sí, por supuesto." Dije.

William sonrió y caminó a mi lado.

Cuando entramos en el patio de Richard, vi no muy lejos de donde estábamos parados el abuelo Robert y Richard. Llevaban espadas de madera. El abuelo le estaba enseñando a Richard con técnicas de espada.

"Párate firme y con los pies separados. Encuentra el equilibrio. Sostén la espada con ambas manos. Siéntelas como una extensión de tus propios brazos". Dijo el abuelo.

"Abuelo, Richard." Los saludé cuando nos acercamos.

"Buenos días Alicia." Dijo el abuelo.

"¡Hermana!" Richard dijo con entusiasmo. Pero luego su rostro se puso amargo cuando vio a William a mi lado.

"Buenos días general Robert, príncipe heredero Richard". Dijo William.

"La mañana era buena hace un rato pero ahora no tanto". Richard murmuró.

"Silencio Richard, no seas irrespetuoso". Dijo el abuelo. "Buenos días William." Saludó a William.

"Hmph." Richard hizo una mueca amarga.

"¿Hice algo para ofender al príncipe?" William me susurró.

"No te preocupes, no lo hiciste." Me reí. "Solo me temo que tiene un complejo de hermanas".

"Ohhh ..." dijo William entendiendo las acciones de Richard.

"Alicia, es bueno que hayas venido aquí." Dijo el abuelo.

"¿Qué pasa abuelo?" Pregunté con curiosidad.

"Sabes que cada príncipe y princesa de

la familia real tiene un caballero personal para servir como su guardaespaldas cuando cumplen catorce años ", dijo el abuelo.

"Sí, lo sé abuelo."