𝐒𝐔𝐍𝐎𝐎 𝐈𝐒 𝐌𝐘 𝐏𝐔𝐏𝐏𝐘 › sungsun ✓

EXTRA O1

—Niki, dime que esto no es una broma

—No, no lo es, ahí viene Sunoo con el cabello color azul.

Sunghoon se estaba muriendo, veía a la distancia como venía hacia él su querido novio con su cabello de otro color, ¿por qué se lo cambió? No no, la pregunta aquí es: ¡¿Por qué todo le queda realmente maravilloso?!

—C-chicos. —Sunoo cuando llegó hasta donde estaban aquel par se sintió nervioso, mordió su labio inferior.

—Bueno, yo iré a buscar a Jungwon, iremos a comprar en la tarde cosas para Bisco, ¿ustedes vendrán? —Sunghoon asintió. —Bien, Ios espero allá.

Se levantó de aquel banco donde estaba y volteó a ver a la pareja.

—Sunoo, ese color le queda muy bien. —el peliazul sonrió. —Los espero allá. —dijo para luego irse, ni bien ese par se miró y él ya se sentía violinista.

Pero, ¡estaba realmente feliz de que al fin su primo ya no estaba en la friendzone! Ese par ya llevaba ocho meses de relación y Niki se sentía súper feliz por ello.

Cuando Niki se había ido, Sunoo se sentó junto al pálido quien no lo dejaba de mirar, el peliazul se avergonzó. —¿N-no te gusta? ¿Me queda mal? Si es así yo puedo ir a pintarme de negro otra ve-...

Sunoo se sorprendió cuando sintió los labios del mayor sobre los suyos, no pudo corresponder porque el mayor ya se había alejado dejándolo sin aire. —No... N-no me calles así. —intentó decir

—Estás precioso, todo te queda bien, Sunoo-yah, yo de verdad no lo entiendo.

—¿No entiendes qué?

—¡No entiendo por qué no estás en un museo, si tu eres una obra de arte!

—¡S-sunghoon no grites que te pueden escuchar! —Sunoo chilló totalmente avergonzado, estaban en el comedor de su instituto donde fácilmente los escucharían.

—Te amo.

Sunoo se calló, sus mejillas sonrojadas hacían que Sunghoon se muriese de ternura. —Y-yo también te amo.

—¡Eres demasiado tierno, en serio!

—¡Sunghoon, basta!

—Que tierno. —murmuró Sunghoon. —¿Vienes a mi casa hoy? Mi mamá no estará y Jay tampoco.

Por alguna razón, Sunghoon había malpensado aquella invitación. ¡Si ves Park, tienes la mente podrida!

—C-claro, iré.

—Bien, vamos con los demás. Niki y Jungwon nos deben estar esperando

( 🦮 )

—¡Woah! Mira esa maleta, de seguro a Bisco le gustaría meterse ahí! —Niki chilló. —La llevamos.

—¿Qué rayos? ¡Bisco ya tiene muchas de esas! —Jungwon se quejó.

—¡Pero no de ese estilo!

—¡Eso no importa!

—Yo la llevaré, no discutas conmigo que saldrás perdiendo. —Niki le sonrió, tomó aquella maleta y se la dió a su novio para que se la tuviese.

—No puede ser. —se quejó.

—Ya me quiero ir. —Sunoo se quejó, a lo que Sunghoon rió.

—¿Por qué?

—Estoy aburrido, no sé, vámonos a mi casa, hyung.

—Pero..

—Ya vámonos...

—Esperen, Sunoo, ¿que clase de propuesta le estás diciendo a Sunghoon hyung? —Jungwon chilló. —¡Eres un pervertido!

—¡Y-yo solo quiero irme a casa! —Sunoo chilló mientras sentía sus mejillas quemar.

—Ya, es mejor que nos vayamos. Van a ser las diez de la noche y aún no se deciden qué comprar. —Sunghoon les dijo.

—Es verdad. —Jungwon habló. —Yo ya me quiero ir, tengo sue-

—¡Hay unas casitas para perros aquí, yo quiero una de esas! —Niki chilló y salió corriendo por lo que él había visto.

—¡Pero Bisco ya tiene cinco, y el ni duerme en ellas! —Jungwon suspiró y negó con su cabeza. —Saben, váyanse. Yo me quedaré con Niki, de seguro se va a demorar más.

—Está bien. —Sunghoon le dijo, se despidieron del menor y fueron al estacionamiento del lugar.

—Hyung, ¿no le parece genial que ya nos vamos a graduar? Sólo faltan dos semanas.

—Sí, sí. —se adentraron en el auto del pálido. —Yo creo qu... —los labios del menor sobre los suyos no lo dejaron terminar, Sunghoon abrió sus ojos en grande.

El mayor mordió el labio inferior del menor para luego alejarse escuchando un quejido en el otro. —¿Sunoo, qué-...

—Quería besarte hace rato pero Niki no me dejaba de molestar. —puchereó, Sunghoon comenzó a reír.

—¡Eres tan tierno!

—¡Ya basta!

—Sunoo-yah, el color azul en tu cabello se ve realmente bien.

—Gracias. —sonrió.

—Sunnie, tu... Piensas en... No sé, digo, uhm...

—¿Estás bien?

—Has pensando si... Tal vez, cuando llevemos más tiempo o... ¿A ti te importa el tiempo que llevemos? Ya no sé ni lo que digo, lo siento.

—¿H-hyung, qué sucede?

—Ahora que ya nos graduamos y yo trabajaré en la empresa de mi tío con las canciones, a tí... ¿te gustaría vivir juntos? Yo... Llevo pensándolo mucho tiempo.

Sunoo quedó con sus labios entreabiertos por aquello, el mayor ya se estaba arrepintiendo de haberlo dicho. —¿Sabes qué? olvídalo, era solo por curio-...

—¡Me encantaría vivir contigo, hyung! —Sunoo lo interrumpió.

—¿S-sí?

—¡Sí, de verdad, sí! —Sunghoon sonrió.

Sunghoon se acercó al menor y lo besó, por un momento se habían olvidado que se encontraban en un estacionamiento.

—Me alegra escuchar eso. —le sonrió. —Le comienzas a decir a Jay que no voy a dejar que entre a la casa.

—¡Hyung!