𝑷𝒆𝒓𝒔𝒆𝒇𝒐𝒏𝒆 |ᴘʀɪɴᴄɪᴘᴇ ᴄᴀꜱᴘɪᴀɴ|

Capitulo 1

Era una día soleado en el cual los pájaros cantaban y se podría escuchar como el agua corría, chocaba y salpicaba con las rocas, ese día Perséfone había ido a buscar agua al arrolló ya que la fauna con la que vivía llamada Antia, le había dicho que si no llegaba con agua fresca para el medio día sufriría unos azotes lo que menos quería era eso porque siempre que la golpeaban le hacían mucho daño a tal punto en el que ella tenia cicatrices no muy grandes pero estaban ahí. Cerca de las once y media ella empezó a volver a la casa de los faunos con el agua que le habían pedido, ella no veía la hora de tener edad suficiente para irse de esa casa con su hermana y poder ser felices aunque sea unos minutos, antes de que fuera el medio día ella llego a la casa de los faunos y pudo ver como su hermana estaba en la parte trasera cortando leña y si su hermana con 12 años tenia que hacer todo lo que el fauno le digiera.

Cuando entro a la casa dejo el balde con agua a un costado para poder limpiarse los zapatos y ponerse algo mas cómodo en los pies para poder andar dentro de la casa, y no ensuciar, para luego no recibir reproches de los faunos, cuando termino de colocarse sus otros zapatos tomo rumbo así la cocina donde se encontraba una fauna de una altura estándar con el cabello por debajo de los hombros de color castaño claro, sus pezuñas eran oscuras pero se notaba que las cuidaba mucho, sus patas eran de un tono canela, en la parte superior llevaba un delantal que la cubría hasta las rodillas, en lo alto de su cabeza se alzaban dos conos que eran sus cuernos, sin duda era la fauna Antia, Perséfone se acercó muy despacio y coloco el balde con agua sobre la mesa, la fauna la miro y le dijo:

- Este agua tiene que estar caliente ya- dijo Antia con un tono muy enojado- has tardado mil horas en volver te dije que tenia que estar fresca-

- El agua esta fresca porque antes de volver la saque- replicó Perséfone con un tono un poco mas elevado que el de Antia-

- Mas te vale que este fresca porque si no sufrirás severas consecuencias- dijo Antia apuntandola con el dedo-

Luego de eso la fauna tomo un poco de agua y la dejo ir ya que esta estaba bastante fresca, Perséfone puso rumbo al patio donde estaba su hermana menor cuando estaba llegando escucho como la niña sollosaba por lo bajo mientras cortaba leña, cuando vio a Perséfone intento ocultar que estuvo llorando y le regalo una sonrisa que mas que eso parecia una mueca

- ¿Que paso? Porque lloras - pregunto Perséfone tomando la cara de su hermana-

- No es nada para preocuparse, solo que me levante tarde y ya sabes lo que pasa cuando nos levantamos tarde - dijo ella colocando un tronco nuevo para cortarlo-

A Perséfone le pareció raro ya que ella cuando se fue su hermana estaba sentada en la cama colocándose un calcetín pero no dijo  nada para no crear ninguna discusión entre ellas pero lo mas seguro es que en la noche le preguntara y su hermana le terminara diciendo la verdad como pasaba siempre.
Luego de eso ella comenzó a llevar la leña que habia cortado su hermana al cajón donde guardaban la leña y la fue colocando ahi, luego se encaminó a la casa para tomar un baso de agua para su hermana pero cuando intento tomar agua un fauno de un tamaño promedio un poco mas alto que Antia, con sus patas de un color negro azabache brillante, con sus pesuñas bastante  mal cuidadas, por su cabeza se observaba un suabe cabello color miel con unos pequeños cuernos que estaban mas cuidados que sus pesuñas, este era Omnus el fauno que era marido de Antia, este con una cuchara golpeo la mano de la chica y la miro con rechazo para que no tocara lo que le pertenecía a el ya que el tenia un odio particular hacia ella por ser humana esta lo miro con repulsión y dijo

- Dejame tomar agua porque yo la fui a buscar- dijo ella y en su voz se podia distinguir el enojo que tenia-

- No porque eres una abominación al igual que tu hermana, si la bruja blanca todavia estuviera sus padres serian piedra y ustedes no existirían- dijo el hablando mas fuerte cuando nombro a la bruja- y ademas nosotros no los queríamos aquí solo los aceptamos porque Aslan vino a dejarlas en la puerta-